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Chapter Text

El torneo de Super Smash Bros. siempre ha sido un espectáculo de pura adrenalina, pero esta vez, alguien —cuyo juicio claramente debe ponerse en duda— decidió llevarlo al siguiente nivel. No solo trajeron de vuelta a todos los combatientes previos, sino que además sumaron 24 caras nuevas a la mezcla. Ahora, casi 90 luchadores de diferentes mundos, habilidades y personalidades estarán atrapados bajo el mismo techo durante un año entero. Rivalidades legendarias, alianzas inesperadas, caos absoluto… ¿Podrán coexistir sin que la mansión termine en llamas? Spoiler: probablemente no.

Combatiente 01: Mario

Una silla vacía esperaba en medio de una sala casi vacía, salvo por el gigantesco poster de Mario al fondo con su nombre y el número 01 al lado. Pronto, el propio Mario parecía acercarse, su voz cada vez más audible.

—Entonces, ¿solo me siento aquí y hablo directo a la cámara? —preguntó el plomero, cuya voz ya era más sonora gracias al pequeño micrófono en su overol—. Okey, si es así de simple.

—¡Mario! —la voz del comentarista sonó de pronto, alertando a Mario quien se sobresaltó en la silla apenas se sentó—. Bienvenido de vuelta.

—Oh, es usted... —Mario suspiró aliviado—. Oiga, sé que usted es el comentarista de todo, ¿pero no sería mucha molestia avisar antes de hablar de repente? Ya tuvimos un incidente el torneo pasado con Charizard...

—Lo tomaré en cuenta —el comentarista contestó rápidamente antes de cambiar de tema—. ¡Hora de contestar! ¿Qué se siente volver a Smash?

Mario estaba seguro de que su comentario fue pasado por alto y que realmente no será tomado en cuenta, pero decidió dejarlo pasar.

—Bueno, es emocionante, eso es seguro —contestó algo nervioso—. Aunque debo admitir que esto se siente un poco repentino. Digo, el último torneo fue apenas hace 2 años. Casi siempre pasan unos 6 o 7 entre un torneo y otro. Este se siente como algo sacado a la fuerza, pero de todos modos estoy feliz de regresar. Solo espero que la convivencia en la mansión no sea tan caótica esta vez. Pero no se puede esperar menos considerando que somos... ¿qué? ¿Unos 50 combatientes?

—Son 89 —respondió el comentarista directamente.

Las pupilas de Mario se encogieron al escuchar eso, y su bigote se desinfló, mientras que el plomero parpadeó unas cuantas veces antes de...

—¡¿89?! ¡¿PERO QUÉ LES PASA—?!

Combatiente 02: Donkey Kong

—¡Claro que me alegra volver! —dijo el simio alegremente mientras pelaba una banana y comenzaba a comerla—. Siempre es un placer venir a partirle la cara a Mario y a Bowser. Y claro, el caos que ocurre en este lugar cada torneo también es bienvenido. ¡No puedo esperar a ver los rostros nuevos!

—Tal vez sea hora de mencionártelo, Donkey Kong: King K. Rool será parte del torneo este año —dijo el comentarista como si no fuera la gran cosa.

Sin embargo, los ojos de DK se agrandaron, luego parpadeó un par de veces como si asimilara lo que le acaban de decir, y luego aplastó la banana desde su cascara para que saliera disparada hacia su boca. Se la tragó, lanzó la cascara hacia atrás y sonrió desafiante mientras tronaba sus puños.

—¡Ojojo! ¡Creo que este torneo será mi favorito!

Combatiente 03: Link

Link no estaba tranquilo a pesar de estar sentado. Su mano se iba instintivamente hasta la empuñadura de la Espada Maestra envainada en su espalda, sus ojos examinando toda el área como si en cualquier momento le fuesen a saltar encima.

Este Link no era el mismo de torneos anteriores. El del torneo original y Melee venía de una línea de tiempo donde era un niño en el cuerpo de un adulto; el de los torneos Brawl y 4 venía de un mundo asediado por el Reino del Crepúsculo. ¿Este Link? Tenía prácticamente más de 100 años, despertó en un Hyrule sin recuerdos y sin idea de qué hacer o a dónde ir. A pesar de haber recuperado algunos y de que su mundo estaba a salvo, no entendía qué era "Super Smash Bros." ni por qué terminó aquí.

—¡Link! —el comentarista habló—. Bienvenido. Relájate un poco, nadie te hará daño en este lugar. Al menos, nadie que no sea un villano.

—Sigo sin entender por qué estoy aquí —Link respondió.

Esto hizo que el comentarista pareciese no saber qué decir. Los otros Links apenas y decían una o dos palabras, pero este dijo una oración entera sin pelos en la lengua. Cuando pareció recomponerse, aclaró su garganta y respondió.

—Mis disculpas. No acostumbro a escuchar a un Link hablar... de más —el comentarista consiguió decir antes de continuar, ya más calmado—. Estás en Super Smash Bros., un torneo para definir al mejor luchador de todos los mundos, al menos hasta que el próximo venga a reclamar el título. Tú, Link, eres uno de los 6 combatientes de tu universo en participar, aunque solo 2 vienen de la misma línea temporal.

—¿Y eso qué significa? —preguntó Link, sin bajar la guardia.

—Significa que tendrás que demostrar que eres el mejor de tu mundo. Es así de simple.

—¿Y por qué hacemos este... torneo, exactamente?

—No se necesitan motivos para divertirse. Además, nadie muere en estos torneos, solo pierdes.

—...Supongo que no puedo argumentar contra eso.

Una vez Link terminó de hablar, se puso en pie y salió, aunque su postura y la forma en la que veía a todas partes dejaba en claro que no bajaba la guardia.

—Este nuevo Link es... curioso —el comentarista dijo sin más.

Combatiente 04/29: Samus/Samus Zero

—La verdad, creí que el próximo torneo tardaría menos en llegar —confesó la cazarrecompensas, su armadura apagada y a un lado mientras ella se encontraba sentada en la silla con sus piernas cruzadas—. Las personas parecen cada vez más entusiasmadas porque sucedan. Pensé que solo nos darían un año libre antes del próximo torneo.

—Ese era el plan, pero hubo un combatiente... complicado de alcanzar —respondió el comentarista—. Al menos ha aceptado, por lo que el retraso valió la pena. Solo espero que estés lista para enfrentarte a ciertos... contrincantes controversiales.

—Pff, como si fueran la gran cosa —Samus movió su mano, como si le restase importancia—. ¿A quiénes tenemos esta vez? ¿Una Planta Piraña?

—De hecho sí, pero ella no será un problema para ti —dijo el comentarista—. Estoy seguro que Ridley y Samus Oscura sí lo serán.

La actitud calmada y tranquila de Samus desapareció, y acto seguido, esta se puso en pie, pateó la silla, se puso el traje, apuntó a la cámara y disparó.

Combatiente 04Ԑ: Samus Oscura

La combatiente eco de Samus, Samus Oscura, flotaba en lugar de estar sentada en la silla, irradiando Phazon en su sitio mientras miraba alrededor, como si calculara lo que sucedía.

—¡Samus Oscura! —el comentarista la llamó—. Bienvenida. Disculpa el desorden. Samus... reaccionó a tu adición al plantel exactamente como esperaba.

La copia de Phazon no dijo nada ni reaccionó. Solo seguía flotando, y a pesar de que el visor del casco son sus ojos, puesto que este es su cuerpo normal y no un traje, estos no decían nada sobre lo que estuviese pasando por su cabeza.

—Solo para estar seguro, ¿hay algún inconveniente con tener a tu... conocida alrededor? —preguntó el comentarista para sacarse el tema de una vez.

—...No. Sin problemas —respondió Samus Oscura, su voz siendo idéntica a la de la Samus normal pero más... robótica, y algo distorsionada.

—Más te vale —advirtió el comentarista—. Siéntete como en casa, pero no rompas nada. Mantener una mansión tan grande con tantos invitados ya es suficiente dolor de cabeza.

La criatura de Phazon simplemente asintió y, acto seguido, se retiró sin decir nada más.

Combatiente 05: Yoshi

—¡Yoshi! —el dinosaurio verde demasiado adorable para su propio bien exclamó emocionado mientras tomaba asiento.

—Bienvenido de vuelta, Yoshi —dijo el comentarista—. Supongo que has de estar emocionado por volver, ¿no?

El dinosaurio hizo un sonido alegre mientras asentía con entusiasmo. A pesar de no poder decir más allá de su propio nombre, Yoshi era bastante expresivo y energético. Sin mencionar que es increíblemente tierno.

—Espero que puedas ajustarte a los nuevos combatientes, y a los cambios que hemos hecho por seguridad. Ah, y otra cosa: dile a Kirby que no se coma toda la mesa... otra vez.

Combatiente 06: Kirby

—Hiii! —Kirby saludó mientras meneaba su mano izquierda al altavoz desde el que hablaba el comentarista.

—Hola, Kirby —el comentarista saludó de vuelta con una risita—. Bienvenido de vuelta. Veo que ya te estás haciendo sentir como en casa, ¿no? Espero que puedas ser de ayuda para los nuevos combatientes, en especial Canela. Parece que en cualquier momento se va a desmayar.

—¡Poyo! —respondió la bolita rosa mientras asentía energéticamente.

Combatiente 07: Fox

—Creo que es un poco precipitado el volver tan pronto —dijo el líder de StarFox, algo irritado, mientras se acomodaba en la silla—. Apenas han pasado dos años desde el último torneo. Pensé que no habría otro hasta al menos 2021.

—La demanda de un nuevo torneo nunca cesa —el comentarista respondió—. En cualquier caso, supongo que tu irritación se debe al regreso de Wolf, ¿no?

—Eso es correcto —respondió Fox, suspirando resignado—. No sé quién organizó el torneo ni por qué pensó que traer a todos los que ya hemos participado de vuelta era una buena idea, pero me aseguraré de demostrar mi inconformidad tanto como pueda.

—No me arrepiento de nada —dijo el comentarista con una risa que hizo eco, haciendo a Fox rodar los ojos.

Combatiente 08: Pikachu

El Pokémon amarillo se subió a la silla, sonriendo tiernamente mientras miraba al altavoz.

—¡Pika! —exclamó con entusiasmo.

—Bienvenido nuevamente, Pikachu —dijo el comentarista—. Noté que estabas muy feliz de ver a Pichu otra vez, ¿verdad?

—¡Pika, pi! ¡Pikachu! —el Pokémon respondió con alegría, saltando sobre su lugar—. ¡Pika!

El comentarista rió por lo bajo antes de responder.

—Es bueno saber que estás feliz de verlo de vuelta. Hazlo sentir como en casa, ya que es su primera vez aquí en años.

—¡Pikachu! —respondió el Pokémon felizmente antes de saltar de la silla y correr fuera de allí.

Combatiente 09: Luigi

Luigi entró lentamente en la sala, mirando a su alrededor con evidente nerviosismo. Sus manos temblaban ligeramente cuando se sentó en la silla, y su bigote se movía con cada respiro inquieto que tomaba.

—¡Luigi! —saludó el comentarista con entusiasmo—. ¡Bienvenido de vuelta!

—E-Eh... sí... gracias... —murmuró Luigi, juntando las manos sobre su regazo mientras su mirada se movía inquieta por la sala—. Ehm... ¿puedo preguntar por qué hay tantos villanos invitados esta vez? Ya tenía suficiente lidiando con Bowser, Ganondorf, Wario, Dedede y Bowser Jr...

—Hay que darle variedad al torneo —respondió el comentarista—. ¿Alguno de ellos te ha causado problemas?

—De momento no, pero ya tengo contado todo lo que pueden hacer... —Luigi respondió nervioso antes de empezar a enumerar con sus dedos—. Ridley es un dragón, así que podría comerme de un bocado; Samus Oscura me ve constantemente como si quisiera aniquilarme solo con la mirada; King K. Rool parece querer darme un mordisco, y Sephiroth existe. ¡Eso por sí solo no me hace sentir seguro!

El comentarista suspiró, ya acostumbrado a la actitud de Luigi.

—Ellos saben las reglas, Luigi. No te harán nada —señaló, tratando de mantenerse calmado y comprensivo.

—Les doy dos días antes de que rompan una regla —respondió el plomero de verde con expresión aburrida.

Combatiente 10: Ness

—Es extraño, ¿sabe? —dijo Ness con una risa nerviosa—. He estado aquí desde el primer torneo, y aún así me siento tan nervioso como en su momento. Supongo que aún no me acostumbro del todo a cómo funciona Smash Bros.

—Es completamente normal, Ness —respondió el comentarista con un tono comprensivo—. Este torneo no es como tus aventuras en Eagleland. Aquí, las cosas pueden volverse caóticas en cualquier momento.

Ness asintió, balanceando su bate de béisbol sobre su hombro.

—Sí, eso lo tengo claro. Digo, no todos los días ves a un dragón espacial, un demonio con una espada ridículamente larga y una Planta Piraña en el mismo edificio —dijo con una sonrisa nerviosa—. Pero está bien. Estoy acostumbrado a enfrentarme a cosas raras.

—Y a hacer que vuelen por los aires con tu PK Thunder —bromeó el comentarista, haciendo a Ness reír un poco.

—Supongo que tengo que trabajar en eso... —comentó, rascándose la nuca.

Combatiente 11: Capitán Falcon

—Es genial estar de vuelta —comentó el corredor con los brazos cruzados y una pequeña sonrisa—. Para ser sincero, me siento más cómodo estando en este lugar que en mi mundo. Genuinamente me siento más vivo aquí de lo que jamás me he sentido corriendo en el Blue Falcon.

—Bienvenido seas, Capitán —dijo el comentarista—. Me aseguraré de que este torneo esté a la altura de tu entusiasmo.

—Con lo grande que promete ser, estoy seguro de que lo será —el Capitán Falcón sonrió confiado.

Combatiente 12: Jigglypuff

—¡Jigglypuff! —saludó el comentarista con entusiasmo—. ¡Bienvenida de vuelta! Es un placer tenerte de nuevo en el torneo.

—Jiggly! —exclamó la pequeña bola rosada, inflándose con orgullo.

—Tu Canto sigue siendo una de las técnicas más temidas del torneo, ¿sabes? No hay nada más devastador que dormirse en medio de un combate solo para despertar con una patada en la cara —bromeó el comentarista.

Jigglypuff sonrió con picardía y asintió. Sabía perfectamente el poder que tenía su Canto y lo aprovecharía al máximo.

—Pero dime, ¿cómo te sientes al volver con tantos nuevos combatientes en la lista? —preguntó el comentarista.

Jigglypuff cerró los ojos por un momento y luego los abrió con determinación.

—Puff! Jigglypuff! —declaró, alzando un puño al aire.

—"No importa cuántos sean, ¡yo los haré dormir a todos!" —tradujo el comentarista con una risa—. ¡Esa es la actitud que queremos ver!

Jigglypuff sonrió una vez más, dio un último salto de la silla y salió de la sala, lista para demostrar por qué era una veterana del torneo.

Combatiente 13: Peach

La princesa del Reino Champiñón entró a la sala con una gracia impecable, sosteniendo su vestido con delicadeza mientras tomaba asiento. Su sonrisa era serena, aunque sus ojos brillaban con una mezcla de emoción y picardía.

—¡Princesa Peach! —la saludó el comentarista—. Un gusto tenerte de regreso.

—Oh, muchas gracias —respondió Peach con su tono dulce—. Siempre es un placer participar en Smash Bros. ¡Es tan emocionante!

—Debo preguntarlo… ¿sigues manteniendo la misma estrategia de siempre? Ya sabes, verte adorable y delicada hasta que golpeas a alguien con un sartén en la cara.

Peach rió con elegancia, cubriéndose la boca con una mano.

—Bueno, uno tiene que mantener su reputación, ¿no? —respondió con una sonrisa traviesa—. No puedo dejar que me subestimen.

—Definitivamente nadie lo hará después de los torneos pasados —dijo el comentarista.

Combatiente 13Ԑ: Daisy

—Daisy, bienvenida —dijo el comentarista—. Lamento que nos haya tomado 5 torneos para finalmente invitarte, pero mejor tarde que nunca, ¿no?

—¡¿Bromea?! ¡Es genial por fin estar aquí! —exclamó Daisy con gran entusiasmo—. Oh, tengo como un millón de preguntas sobre este lugar, ¡y no sé por dónde empezar!

—Tal vez debas esperar, y aunque adoro el entusiasmo, trata de controlarte —dijo el comentarista, antes de añadir con cierta picardía—; Guarda los golpes para Bowser en el campo de batalla.

—¡Oh, eso puedo hacerlo! ¡Se lo aseguro! —dijo Daisy con una sonrisa confiada mientras tronaba sus dedos.

Combatiente 14: Bowser

—¡Bowser! —saludó el comentarista—. Bienvenido una vez más.

—Je, como si fuera a rechazar la oportunidad de aplastar a Mario en frente de una audiencia mundial —Bowser respondió con una risa grave—. Es casi una tradición a estas alturas.

—Bueno, esta vez no solo Mario está en la mira. Hay muchos más oponentes dignos de ti.

—Lo sé, y eso es lo mejor —Bowser golpeó sus puños con entusiasmo—. Mientras más fuertes sean, más divertido será aplastarlos.

—Irradias entusiasmo, eso es bueno. ¿Supongo que ya tuviste tus choques con King K. Rool y Ridley como los nuevos villanos del plantel?

Bowser soltó una carcajada ronca y asentó con la cabeza.

—¡Por supuesto! Esos dos creen que pueden intimidarme, pero yo soy el Rey de los Koopas. K. Rool es solo un lagarto con una barriga blanda, y Ridley... bueno, le doy crédito por su apariencia, pero dudo que haya enfrentado a alguien como yo antes.

El comentarista rió, aunque con un leve nerviosismo.

—Bueno, no hay duda de que la sala de villanos será más caótica que nunca. Con Ganondorf, Sephiroth, K. Rool, Ridley y tú, seguro habrá disputas por quién es el verdadero “jefe final” de Smash Bros.

—Tsk, no necesito discutir eso —Bowser bufó, apoyando un brazo sobre el respaldo de la silla—. Todo el mundo sabe que yo soy el jefe final por excelencia. No importa cuántos de esos tipos lleguen aquí, al final del día, Bowser sigue siendo el villano más grande de todos.

Combatiente 15: Ice Climbers

Los dos pequeños montañistas entraron a la sala saltando de emoción, con sus mazas en la espalda y sonrisas radiantes. Nana y Popo se miraron el uno al otro antes de saludar con energía.

—¡Popo y Nana! —exclamó el comentarista—. ¡Bienvenidos de vuelta!

—¡Sí, estamos listos para escalar hasta la cima otra vez! —respondió Popo con entusiasmo, ajustando su capucha.

—¡Y esta vez no vamos a dejar que nos congelen fuera del torneo! —añadió Nana, cruzándose de brazos con determinación.

El comentarista sonrió con simpatía.

—Sí, lamento la ausencia en el torneo pasado. La comunidad realmente los extrañó.

—¡Nosotros también extrañamos estar aquí! —dijo Nana—. ¡Pero volvimos con más energía que nunca!

—¡Exacto! —asintió Popo—. Y esta vez vamos a demostrar que el trabajo en equipo es imparable.

—Definitivamente tienen una de las dinámicas más únicas del torneo —comentó el presentador—. ¿Alguna estrategia en mente para esta vez?

Nana y Popo intercambiaron una mirada cómplice antes de responder al unísono:

—¡Golpearlos con nuestras mazas hasta la victoria!

El comentarista rió.

Combatiente 16: Sheik

Una figura ágil y silenciosa apareció en la sala sin hacer ruido. Vestida con su característica armadura azul y vendas que cubrían su rostro, Sheik inclinó levemente la cabeza en señal de saludo antes de sentarse con una postura elegante y lista para la acción.

—Sheik —dijo el comentarista con respeto—. Siempre es un honor tenerte aquí.

Sheik asintió levemente, manteniendo la mirada seria.

—He estado observando a los nuevos combatientes —dijo con voz serena—. Será interesante medir sus habilidades en combate.

—Como siempre, manteniendo el profesionalismo —comentó el presentador—. ¿Algún rival en particular que te llame la atención?

—Todos los que estén dispuestos a enfrentarme con determinación —respondió Sheik—. Pero me intriga especialmente ver qué tan hábil es Sephiroth.

El comentarista asintió con una sonrisa.

—Definitivamente será un combate fascinante. Bueno, Sheik, que la velocidad y la estrategia estén de tu lado.

Sheik inclinó ligeramente la cabeza antes de desaparecer con la misma rapidez con la que había llegado.

Combatiente 17: Zelda

La princesa de Hyrule entró a la sala con gracia, sujetando los pliegues de su vestido con delicadeza. Su expresión era serena, pero había un brillo de emoción en sus ojos.

—¡Princesa Zelda! —saludó el comentarista—. ¡Bienvenida una vez más al torneo!

—Muchas gracias —respondió Zelda con una leve reverencia—. Es un honor estar aquí de nuevo.

—Tu estilo de combate siempre ha sido una combinación de poder y elegancia. ¿Has estado entrenando para esta ocasión?

Zelda sonrió con confianza.

—Por supuesto. La magia requiere estudio y disciplina, y me he asegurado de mejorar mis técnicas. No solo quiero ser una combatiente fuerte, sino también una digna representante de Hyrule.

—Bueno, sin duda muchos esperan verte en acción.

Combatiente 18: Dr. Mario

—¡Dr. Mario! —saludó el comentarista—. ¡Bienvenido de nuevo al torneo!

—¡Gracias! Siempre es bueno tomar un descanso de la medicina para… bueno, lanzar unas cuantas píldoras por ahí —respondió el doctor con una leve sonrisa.

—Tienes un enfoque interesante para la batalla. En lugar de puños y patadas, prefieres usar tu conocimiento médico… aunque, siendo sinceros, esas píldoras parecen más peligrosas que curativas.

El doctor cruzó los brazos y asintió.

—Lo importante es el resultado. Si mis píldoras pueden debilitar a mis oponentes antes de que me alcancen, entonces estoy haciendo algo bien. Además, ¡la ciencia es poderosa!

El comentarista soltó una carcajada.

—No cabe duda. Aunque debes admitir que la mayoría de los combatientes siguen preguntándose de qué están hechas exactamente tus píldoras…

—Confidencialidad médica —respondió Dr. Mario con una sonrisa astuta, ajustando sus guantes.

Combatiente 19: Pichu

Una pequeña bola de energía amarilla saltó a la sala con entusiasmo, moviendo sus orejas de un lado a otro mientras emitía pequeños chispazos.

—¡Pichu, bienvenido de vuelta! —saludó el comentarista con una sonrisa—. ¿Listo para la acción?

—¡Pichuuu! —chilló el Pokémon con emoción, dando un brinco en el aire.

—Sabemos que eres uno de los combatientes más rápidos y ágiles, pero también uno de los más… bueno, frágiles. ¿Cómo planeas evitar lastimarte a ti mismo esta vez?

Pichu inclinó la cabeza, parpadeando por un momento, antes de inflar los cachetes con determinación.

—¡Pichu pi!

El comentarista asintió con una risa.

—"Voy a ser más fuerte y más rápido que nunca". Esa es la actitud que queremos ver.

Combatiente 20: Falco

—Falco Lombardi —dijo el comentarista—. Siempre con esa confianza inquebrantable.

—Cuando eres tan bueno como yo, ¿por qué no tener confianza? —respondió Falco con una media sonrisa.

—No hay duda de que eres uno de los mejores tiradores aquí, pero... ¿crees que eso será suficiente para enfrentar a los nuevos combatientes?

Falco chasqueó la lengua y se encogió de hombros.

—No me preocupa. Mientras mantenga mi velocidad y reflejos, nadie me tocará.

El comentarista sonrió.

—Me imagino que Fox estará esperando enfrentarte una vez más.

—He perdido la cuenta de cuántas veces le he ganado —dijo Falco con aire despreocupado—. Pero si quiere intentarlo otra vez, estaré listo.

Combatiente 21: Marth

El príncipe de Altea entró con elegancia, su mano descansando sobre la empuñadura de su espada. Su porte era digno y sereno, y su mirada reflejaba determinación.

—¡Marth! —saludó el comentarista—. Siempre es un honor recibir a un guerrero de tu calibre.

Marth asintió con una leve sonrisa.

—El honor es mío. Smash Bros. siempre ha sido una prueba de habilidad, y estoy ansioso por demostrar mi destreza una vez más.

—Tu técnica con la espada ha sido admirada por muchos. ¿Has estado entrenando para esta ocasión?

Marth asintió con seguridad.

—Cada batalla es una oportunidad de crecimiento. No importa cuántas veces haya luchado antes, siempre busco mejorar.

—Esa es la mentalidad de un verdadero espadachín —dijo el comentarista con respeto.

Combatiente 21Ԑ: Lucina

Una figura muy similar a Marth entró poco después, con una capa ondeando detrás de ella. Su postura era firme y determinada, y su espada descansaba con elegancia en su cintura.

—Lucina —saludó el comentarista—. Es un placer verte de vuelta en el torneo.

—El placer es mío —respondió Lucina con una leve sonrisa—. Smash Bros. es una gran prueba de habilidad, y estoy lista para afrontarla.

—Algunos dicen que tu estilo es similar al de Marth, pero sabemos que tienes tus propias técnicas. ¿Tienes algo nuevo preparado para este torneo?

Lucina asintió.

—Siempre busco perfeccionar mi técnica. Si bien mi estilo se asemeja al de mi ancestro, he trabajado en mejorar mi velocidad y precisión.

—Entonces será interesante ver cómo te desenvuelves contra oponentes nuevos y veteranos.

Combatiente 22: Link Niño

Un niño vestido de verde entró a la sala, ajustándose su gorro y sosteniendo su espada con orgullo.

—¡Link Niño! —saludó el comentarista—. Es bueno verte de regreso. No te veía desde Melee.

El joven héroe asintió con una mirada decidida.

—¡Hyaaah!

—Definitivamente sigues siendo tan energético como siempre. ¿Cómo te sientes sobre este torneo? Considera que verás caras familiares y completamente nuevas por igual.

Link Niño desenfundó su espada por un momento y la observó con seriedad antes de volver a enfundarla.

—Estoy listo para la batalla.

El comentarista sonrió.

—Has crecido mucho desde la última vez que estuviste aquí. ¿Crees que podrás estar a la altura de los nuevos desafíos?

Link Niño asintió con firmeza.

—Siempre hay algo nuevo que aprender. Pero no importa cuán grande sea el enemigo, siempre hay una forma de vencerlo.

Combatiente 23: Ganondorf

El aire en la sala pareció volverse más pesado cuando una imponente figura cruzó el umbral. Sus pisadas resonaban con fuerza en el suelo, y su presencia por sí sola bastaba para silenciar cualquier conversación. Con una armadura oscura adornada con grabados gerudo y una capa roja que se agitaba tras él, el Rey del Mal se detuvo en el centro de la sala, mirando al altavoz desde el que hablaba el comentarista—dado a que no estaba en aquella sala presente, y nadie sabe como se ve—con una expresión de absoluto desdén.

—Ganondorf —dijo el comentarista con un tono que mezclaba respeto y precaución—. El Emperador del Mal regresa una vez más al torneo.

Ganondorf cruzó los brazos y esbozó una sonrisa arrogante.

—Por supuesto. Ningún torneo es digno sin mi presencia —afirmó con voz grave—. Y esta vez, no habrá piedad.

—Siempre has sido uno de los luchadores más temidos en Smash. Pero con la llegada de nuevos combatientes, ¿crees que podrás mantener ese dominio?

El hechicero soltó una breve carcajada, como si la pregunta le pareciera absurda.

—¿Mantenerlo? —repitió con burla—. No necesito mantener nada. Mi poder es absoluto. No importa cuántos héroes se interpongan en mi camino... su destino será el mismo.

—Me imagino que tienes especial interés en enfrentarte a Link y Zelda una vez más, en especial considerando el... estado del nuevo Link.

Ganondorf inclinó ligeramente la cabeza, su sonrisa volviéndose más oscura.

—Siempre es un placer aplastar la esperanza de esos dos. Pero esta vez, mi interés se extiende más allá de ellos. Hay nuevos rostros que podrían entretenerme… por un breve instante.

Combatiente 24: Mewtwo

Una presencia etérea se manifestó en la sala, trayendo consigo una oleada de energía psíquica que hizo vibrar el aire. Sin necesidad de pasos pesados ni movimientos ostentosos, la figura flotó hasta el centro de la sala con una gracia casi sobrenatural. Sus ojos fríos y calculadores recorrieron el entorno, como si estuviera evaluando cada rincón del lugar con una percepción más allá de la comprensión humana.

El comentarista se tomó un segundo antes de hablar, como si incluso él sintiera la presión de esa mirada penetrante.

—Mewtwo… —dijo con un tono de respeto evidente—. La criatura más poderosa jamás creada ha regresado al torneo.

El Pokémon psíquico cerró los ojos por un instante, antes de responder con su voz telepática, resonando en la mente del comentarista.

—No regresé por simple entretenimiento. Estoy aquí porque deseo una prueba real… una batalla que valga mi tiempo.

—Siempre has sido un combatiente excepcional, pero en esta ocasión te enfrentarás a oponentes completamente nuevos. ¿Crees que encontrarán en ti un rival insuperable?

Mewtwo entrecerró los ojos, su cola azotando el aire con un movimiento lento pero firme.

—El poder por sí solo no define la victoria… La mente es el arma definitiva. Aquellos que confían únicamente en su fuerza caerán ante una voluntad superior.

—Interesante perspectiva —comentó el presentador.

Combatiente 25: Roy

El sonido de un metal afilado resonó en la sala cuando una figura joven pero imponente entró con paso decidido. Su armadura azul y dorada reflejaba la luz con un brillo feroz, y la capa morada ondeaba tras él con cada movimiento. Con la espada sellada a su cintura y una mirada determinada, Roy se detuvo en el centro de la sala, observando con atención a su alrededor.

El comentarista no tardó en reaccionar.

—¡Roy regresa al combate! —anunció con entusiasmo—. El joven león de Pherae ha demostrado ser un rival formidable en cada torneo. Dime, Roy, ¿cómo te sientes al volver a la arena?

Roy cruzó los brazos y sonrió con confianza.

—Es un honor regresar. Cada torneo es una oportunidad para probarme a mí mismo y seguir mejorando. No importa quién se interponga en mi camino, daré todo en cada batalla.

—Has demostrado ser un espadachín excepcional, pero en esta ocasión te enfrentarás a rivales aún más poderosos. ¿Tienes en mente algún oponente que esperes con especial interés?

Roy inclinó ligeramente la cabeza, meditando la pregunta.

—Siempre es emocionante enfrentarme a otros espadachines. Marth y Ike son oponentes que respeto profundamente, pero también tengo curiosidad por los nuevos combatientes. Sephiroth... Byleth... y, por supuesto, el nuevo Link. Quiero ver hasta dónde llega su habilidad.

—Un espíritu combativo digno de un guerrero —afirmó el comentarista.

Combatiente 25Ԑ: Chrom

—¡Y aquí lo tenemos! Chrom, el Príncipe de Ylisse y capitán de los Custodios, se une al torneo. Sentimos no haberte invitado la última vez, pero los espacios ya estaban llenos.

Chrom asintió con una leve sonrisa.

—No hay problema. Me alegra al fin estar aquí. La competencia se ve fuerte, pero estoy listo para enfrentar lo que venga.

—Has demostrado ser un guerrero formidable para unirte a Smash, aunque algunos te están comparando con otros espadachines. ¿Sientes que tienes algo que probar?

Chrom soltó una breve risa.

—No lucho para probar nada. Peleo porque me apasiona el combate y porque cada batalla es una oportunidad de crecer. Si alguien cree que solo soy una sombra de otro espadachín, los invito a enfrentarse a mí y descubrirlo por sí mismos.

—Una actitud admirable. Dime, ¿hay algún combatiente al que desees enfrentar en particular?

Chrom cruzó los brazos, pensativo.

—Siempre quise pelear contra Marth y Roy, pero también tengo curiosidad por enfrentar a la chica nueva, Byleth. He oído que maneja un estilo de combate único con varias armas. Será interesante medir mi espada contra la suya.

—Sin duda, eso sería un enfrentamiento digno de presenciar.

Combatiente 26: Mr. Game & Watch

—¡Y aquí lo tenemos! El enigmático, el inmutable, el inconfundible... ¡Mr. Game & Watch!

El combatiente hizo un gesto exagerado de asentimiento, acompañado por un bip-bip mecánico.

—Siempre es interesante verte en el torneo —continuó el comentarista—. A pesar de que muchos luchadores han evolucionado a lo largo de los años, tú sigues siendo… bueno, único. ¿Cómo te sientes al regresar?

Mr. Game & Watch sacó una pequeña campana y la hizo sonar dos veces.

—Sabias palabras —respondió el comentarista con tono humorístico—. Dicen que el minimalismo es la clave de la eficacia.

El personaje realizó un par de gestos rápidos, cambiando entre diversas formas: un cocinero lanzando comida, un bombero con una red y, por un breve instante, el temido martillo del "9" apareciendo en su mano.

—¡Ah, sí! Tu icónica habilidad con el Juez sigue siendo un arma impredecible —señaló el comentarista—. Dime, ¿hay algún combatiente en particular que te llame la atención?

Mr. Game & Watch giró sobre sí mismo como si procesara la pregunta y luego levantó una pizarra con un número "9" dibujado en ella.

—Vaya, no quieres decir nombres, pero dejas claro que cualquier oponente debería estar preparado para lo inesperado —dijo el comentarista entre risas.

Combatiente 27: Meta Knight

—Y aquí tenemos... a Meta Knight —anunció con voz firme—. El enigmático espadachín de Dream Land regresa al torneo. Dime, ¿qué te motiva a competir esta vez?

Meta Knight no respondió de inmediato. Sus ojos centellearon un poco más, y luego, con una voz profunda y pausada, respondió:

—El combate es el verdadero camino al dominio. No hay honor en la ociosidad.

—Siempre has sido un guerrero de pocas palabras, pero con una destreza incomparable —continuó el comentarista—. Se han unido muchos nuevos combatientes al torneo. ¿Alguno en particular que llame tu atención?

El caballero de capa extendió un ala y la envolvió levemente alrededor de sí mismo antes de responder.

—El filo de mi espada probará su temple contra cualquier rival. Sin embargo... —sus ojos brillaron con un tono afilado— hay un oponente cuya habilidad deseo poner a prueba. Sephiroth.

El comentarista rió.

—Muchos están intrigados por ese contrincante. Tal parece que su mera presencia ya le ha hecho ganar varios contrincantes. Y, siendo honesto, tú y él no están lejos del otro. Ambos son guerreros disciplinados, envueltos en misterio y con una velocidad que desafía lo normal. Será una batalla digna de ser presenciada.

Meta Knight asintió levemente y llevó una mano a la empuñadura de su espada, Galaxia.

—Las palabras carecen de significado en la arena. Solo la hoja hablará.

Combatiente 28: Pit

—¡Pit, el capitán de la guardia de Palutena, está de vuelta en el torneo! —anunció el comentarista con entusiasmo—. Siempre traes una gran energía a la competencia. ¿Cómo te sientes al regresar?

—¡Más que listo! —exclamó Pit con una sonrisa radiante—. Siempre es un honor pelear en el torneo, y esta vez no pienso quedarme atrás.

—Has demostrado ser un luchador veloz y versátil en entregas anteriores. Pero con tantos nuevos rostros en esta edición, ¿hay alguien en particular con quien te gustaría cruzar espadas?

Pit se cruzó de brazos y frunció ligeramente el ceño, pensativo.

—Bueno, siempre es emocionante enfrentarme a mis viejos rivales, como Link o Marth. Pero... tengo curiosidad por alguien en especial. ¡Sora! He oído que es un maestro del combate aéreo y usa magia de formas increíbles. ¡Será una pelea entre guerreros bendecidos por la luz!

—¡Un enfrentamiento entre héroes con poderes celestiales suena como algo que nadie querrá perderse! Dime, ¿alguna última declaración antes del torneo?

Pit desenfundó sus Espadas Sagradas y adoptó una pose lista para la batalla.

—¡No importa cuán fuerte sea el enemigo, siempre lucharé con todo mi corazón!

Combatiente 28Ԑ: Pit Sombrío

—Y aquí lo tenemos... Pit Sombrío —anunció el comentarista, con un matiz de expectación en su voz—. Siempre es interesante verte en la arena. Dime, ¿qué te trae de vuelta al torneo?

El ángel oscuro dejó escapar una risa breve y arrogante.

—¿Necesito una razón? —preguntó con tono burlón—. Ver a todos estos combatientes presumiendo de su fuerza… no podía quedarme fuera de la diversión.

—Bueno, esa es una forma de verlo —replicó el comentarista—. Tu estilo de pelea es similar al de Pit, pero con algunas diferencias notables. ¿Cómo crees que te irá en esta edición?

Pit Sombrío inclinó la cabeza, su sonrisa ensanchándose.

—Pit sigue siendo un iluso optimista, pero yo… yo no tengo esas distracciones. No me detendré hasta demostrar que soy el mejor.

El comentarista asintió con interés.

—Y hablando de demostrar tu fuerza, ¿hay algún oponente en particular al que quieras enfrentar?

El ángel oscuro afiló la mirada y chasqueó la lengua antes de responder.

—Podría decir Pit, pero ya conozco todos sus trucos. Esta vez, quiero algo diferente. Tal vez Cloud... o Ganondorf. Alguien con un poder que valga la pena aplastar.

—Ambiciosa elección. Sin duda, cualquiera de esos combates sería increíble de ver.

Combatiente 30: Wario

Las puertas de la sala se abrieron con un estruendo metálico, y un sonido inconfundible llenó el ambiente: una carcajada áspera y burlona, seguida del rugido de un motor.

—¡Wahahaha! ¡Abran paso al gran Wario! —exclamó el recién llegado mientras derrapaba su motocicleta dentro de la sala, dejando marcas en el suelo.

El comentarista no pudo evitar reír ante la entrada estrafalaria.

—Y aquí tenemos al inigualable, inconfundible… ¡Wario! Siempre con un estilo único. ¿Cómo te sientes al regresar al torneo?

Wario apagó su moto con un golpe y bajó de un salto, ajustándose su casco amarillo antes de responder con orgullo.

—¡Me siento como un millón de monedas de oro! ¡Y cuando gane el torneo, voy a ser aún más rico! Wahahaha.

—Parece que vienes motivado por más que solo la gloria.

—¡Pues claro! ¿De qué me sirve la gloria si no viene con una bolsa llena de billetes? —dijo, frotándose las manos—. Y además, ¡este torneo es una oportunidad perfecta para demostrar que soy el mejor!

—Eres un luchador impredecible, con un estilo que combina fuerza bruta, velocidad y... bueno, ciertos métodos poco ortodoxos. ¿Cómo crees que te irá contra los nuevos participantes?

Wario sacó pecho y soltó una carcajada.

—¡No me importa quién esté aquí! ¡Los voy a aplastar a todos! Pero si tengo que elegir a alguien… quiero darle una lección a ese presumido de Kazuya. ¡Cree que puede ir por ahí lanzando gente a los volcanes! ¡Pues yo lo voy a lanzar al suelo una y otra vez! Wahahaha.

Combatiente 31: Snake

—Y aquí lo tenemos... el legendario soldado, el maestro de la infiltración… ¡Snake! —anunció el comentarista con entusiasmo—. Hace tiempo que no participabas en el torneo. ¿Qué te hizo volver?

Snake exhaló por la nariz, pensativo, antes de responder con su característica voz grave.

—La información es clave en cualquier misión. Y este torneo… tiene demasiadas piezas nuevas en el tablero. Quiero ver de qué son capaces.

—Interesante perspectiva —dijo el comentarista—. Sabemos que eres un combatiente sigiloso pero letal, con un arsenal que pocos pueden igualar. ¿Cómo te sientes con la competencia actual?

Snake cerró los ojos un momento y asintió con la cabeza.

—Este no es un simple torneo de fuerza. Es una guerra de estrategia, de paciencia. Cualquiera que venga solo a lanzar golpes… caerá antes de que se dé cuenta.

—Definitivamente, nadie querrá subestimarte —comentó el presentador—. Ahora, dime… ¿hay algún oponente que te interese enfrentar?

Snake abrió un ojo y dejó escapar una ligera sonrisa.

—Siempre es bueno medir fuerzas con los mejores. Pero hay uno que me llama la atención... Sephiroth.

—Vaya, parece que el ángel de una sola ala ha atraído bastante atención en este torneo —respondió el comentarista—. ¿Por qué él?

—Es metódico, implacable... y esconde algo detrás de esa calma. Quiero ver qué tan lejos puede llegar su control en una batalla real.

Combatiente 32: Ike

—¡Y aquí lo tenemos! ¡El guerrero sin igual, el heredero del linaje de los mercenarios... Ike! —anunció el comentarista con gran entusiasmo—. Eres un veterano del torneo, conocido por tu increíble fuerza. ¿Cómo te sientes al regresar?

Ike inclinó ligeramente la cabeza y respondió con su característico tono calmado y decidido:

—Siempre hay batallas que pelear. Y este torneo es el mejor lugar para ponerme a prueba.

—Directo al punto, como siempre —comentó el presentador—. Sabemos que tu estilo de combate es despiadado, basado en golpes poderosos y una resistencia inquebrantable. Con tantos nuevos rostros en esta edición, ¿hay algún oponente que llame tu atención?

El espadachín meditó unos segundos antes de responder.

—Hay muchos guerreros fuertes aquí. Pero si tuviera que elegir... Ganondorf.

El comentarista levantó las cejas con sorpresa.

—Vaya elección. Un duelo de pura fuerza bruta. ¿Por qué él?

Ike cerró los ojos un instante antes de hablar.

—No me interesa la fama ni los títulos. Solo quiero enfrentarme a alguien que pueda empujarme al límite. Y si hay alguien aquí que representa el poder en su forma más pura... es él.

—¡Eso es lo que nos gusta escuchar! —exclamó el comentarista—. Sin duda, un combate entre ustedes dos sería un espectáculo inolvidable.

Combatientes 33-35: Entrenadora Pokémon/Leaf (Squirtle, Ivysaur y Charizard)

—¡Ah, la Entrenadora Pokémon! —el comentarista dijo, reprimiendo una risa al ver lo inquieto que estaba Squirtle sobre el regazo de Leaf, la entrenadora, mientras que Ivysaur estaba tranquila al lado de su dueña. Mientras, Charizard estaba ocupado de fondo, observándolo todo con la intención de desobedecer a Leaf—. Me alegra ver que tus Pokémon siguen en forma, aunque... Charizard se ve igual de desafiante que el torneo pasado, y eso que solo estuvo él.

Leaf suspiró y cruzó los brazos, observando de reojo a su Charizard, que bufó en respuesta y desvió la mirada con aire orgulloso.

—Bueno, ¿qué te puedo decir? Es terco, fuerte y siempre quiere hacer las cosas a su manera. Pero eso no cambia el hecho de que somos un equipo —dijo con confianza.

Squirtle, emocionado por la entrevista, saltó de su regazo y alzó los brazos con una gran sonrisa.

—¡Squirtle!

—¡Eso es espíritu de batalla! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. La última vez solo competiste con Charizard, pero ahora traes a tu equipo completo. ¿Por qué la decisión?

Leaf sonrió con orgullo y acarició la cabeza de Ivysaur, quien cerró los ojos con tranquilidad.

—Este torneo es un desafío único, y quiero que mis compañeros brillen juntos. Squirtle es veloz y escurridizo, Ivysaur tiene una gran versatilidad con sus lianas y ataques de largo alcance, y Charizard… bueno, es pura potencia. Los tres merecen demostrar de lo que son capaces.

—Una estrategia equilibrada, sin duda —comentó el presentador—. Con tantos luchadores en el torneo, ¿hay algún combate que esperas con ansias?

Leaf apoyó una mano en la cadera y sonrió con determinación.

—Siempre es divertido enfrentarme a otros Pokémon, así que Lucario o incluso Incineroar podrían ser oponentes interesantes. Pero si tuviera que elegir... creo que Greninja me llama la atención. Es un luchador ágil y sigiloso, y me encantaría ver cómo se compara con mi equipo.

—¡Eso sí que sería una pelea épica! —dijo el comentarista—. ¿Alguna última declaración antes de que comience la acción?

Leaf miró a sus Pokémon y luego al altavoz desde el que hablaba el narrador con una sonrisa confiada.

—¡No importa qué tan duro sea el combate, daremos lo mejor de nosotros y nos divertiremos al máximo!

Con esa declaración llena de energía, Squirtle dio una voltereta, Ivysaur lanzó un látigo cepa al aire en señal de emoción, y Charizard, sin poder evitarlo, dejó escapar una llamarada hacia el techo antes de girarse con actitud desafiante.

El comentarista rió.

—¡Parece que la competencia va a arder con ustedes en la arena! ¡Suerte, entrenadora!

Combatiente 36: Diddy Kong

—Oh, claro que me alegro de haber regresado —dijo Diddy con una sonrisa nerviosa—. Aunque, a decir verdad, creo que Donkey está demasiado emocionado de que King K. Rool esté por aquí. Esos dos siempre parecen estar listos para golpearse entre sí...

El comentarista rió ante la observación de Diddy, asintiendo con entusiasmo.

—¡Sin duda! ¡La rivalidad entre Donkey Kong y King K. Rool es legendaria! Pero volviendo a ti, Diddy… Eres rápido, ágil y con un arsenal de trucos que han dejado a más de un oponente sorprendido. ¿Cómo te sientes al volver al torneo?

Diddy cruzó los brazos y se inclinó levemente hacia el micrófono con una sonrisa confiada.

—Estoy listo para la acción. Siempre es divertido demostrar que el tamaño no lo es todo.

—¡Esa es la actitud! —exclamó el comentarista—. Con tantos competidores nuevos y veteranos en esta edición, ¿hay alguien en especial contra quien quieras pelear?

Diddy se llevó la mano al mentón, pensando unos segundos.

—Mmm... Bueno, cualquier pelea es buena mientras haya diversión, pero... Fox y yo siempre tenemos duelos veloces. Me gustaría ver si todavía puedo seguirle el ritmo.

—¡Una batalla entre dos de los luchadores más rápidos! Eso suena espectacular —dijo el comentarista con emoción—. ¿Y qué hay de King K. Rool? ¿Tienes algo que decir sobre su regreso?

El mono miró de reojo hacia donde su eterno enemigo debía estar preparándose y sonrió con picardía.

—Solo diré que, si Donkey no lo deja KO primero, yo le daré unos buenos golpes de cortesía.

—¡Eso es lo que queremos oír! —afirmó el comentarista—. ¡Diddy Kong regresa con todo, y no podemos esperar a verlo en acción!

Combatiente 37: Lucas

—¡Aquí lo tenemos! ¡El psíquico de Tazmily, el niño con un corazón más grande que su poder... Lucas! —anunció el comentarista con entusiasmo—. Hace tiempo que no te vemos en acción. ¿Cómo te sientes al regresar?

Lucas bajó la mirada un momento antes de responder en voz baja.

—Un poco nervioso... pero también emocionado. Este torneo siempre ha estado lleno de grandes luchadores, y quiero dar lo mejor de mí.

—Eso es completamente válido, Lucas. Eres conocido por tu estilo de combate basado en el uso del PSI y tu increíble resiliencia. ¿Crees que tus habilidades han mejorado desde la última vez que competiste?

Lucas levantó la mirada con un poco más de seguridad.

—Sí. He entrenado mucho con mi PSI y también con mi defensa. No soy el más fuerte, pero sé que puedo resistir y encontrar una oportunidad para contraatacar.

—¡Eso es espíritu de luchador! —exclamó el comentarista—. Ahora, dime... ¿hay algún oponente en particular contra quien quieras probarte?

Lucas pensó un momento, jugando con sus dedos antes de responder.

—Ness.

—¡Vaya, vaya! Un duelo entre dos maestros del PSI... ¡Eso sería legendario! ¿Por qué él?

Lucas sonrió levemente, aunque con un toque de timidez.

—Él es fuerte y siempre ha sido alguien a quien admiro. Peleamos antes, pero esta vez quiero demostrar cuánto he crecido.

—¡Eso sí que suena a un combate inolvidable! —afirmó el comentarista.

Combatiente 38: Sonic

—¡Duh! Claro que me encanta haber regresado —aseguró Sonic con su sonrisa confiada de siempre, brazos y piernas cruzadas mientras se reclinaba en la silla—. A este punto, me asustaría que no lo hiciera. Dicho eso, saber que todos los demás combatientes vuelven y caras nuevas llegan sí fue una sorpresa, ¡pero no es nada con lo que no pueda lidiar!

El comentarista rió ante la actitud despreocupada del erizo.

—¡Siempre con la misma confianza! Y no es para menos. Eres uno de los luchadores más veloces del torneo, y tu estilo de combate nunca deja de impresionar. ¿Cómo te sientes con la competencia esta vez?

Sonic se encogió de hombros y sacudió un dedo con una sonrisa burlona.

—Eh, más de lo mismo, pero con un par de sorpresas. Rápido, fuerte, grande, pequeño... No importa quién sea, todos van a tener que esforzarse si quieren seguirme el ritmo.

—¡Eso sí que es confianza! —exclamó el comentarista—. Y hablando de rivales, ¿hay alguien en particular contra quien quieras medirte?

Sonic apoyó un codo en el brazo del asiento, llevando una mano a su barbilla con aire pensativo.

—Bueno, medio plantel quiere romperle la cara al chico anime con problemas maternales... —bromeó el erizo, refiriéndose a Sephiroth—. ¿Pero yo? Quiero enfrentarme a Min Min. Tal vez sea el ser vivo más rápido del mundo, y el combatiente más veloz del torneo, pero los brazos extendibles de esa chica pueden ponerme en un aprieto. Amo ser veloz, ¡pero estar al borde del peligro es lo que hace mi vida emocionante! Así que, Min Min, si ves esto: ¡más te vale aceptar el reto!

—¡Eso es lo que queremos escuchar! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Una batalla entre velocidad y alcance suena como un espectáculo garantizado.

Sonic se inclinó hacia el micrófono con su sonrisa confiada de siempre.

—Y claro, si alguien más quiere desafiarme, no me importa. Solo recuerden que, al final del día... ¡no hay nadie más rápido que yo!

Combatiente 39: Rey Dedede

—¡Y aquí viene el rey de los pingüinos, el monarca más rimbombante de Dream Land... el grandioso Rey Dedede! —anunció el comentarista con gran entusiasmo mientras el enorme pingüino entraba en la sala, balanceando su enorme martillo sobre un hombro.

Dedede dejó escapar una gran carcajada mientras daba un pisotón que hizo retumbar el suelo.

—Siempre es un espectáculo verte en acción, Rey Dedede. Sabemos que eres un combatiente de peso, en más de un sentido, y tu martillo sigue siendo un arma temible. ¿Cómo te sientes para esta edición del torneo?

Dedede hinchó el pecho con orgullo, ajustando su bufanda y golpeando su martillo contra su mano con mirada desafiante.

—¡Eso sí que es confianza! Y con tantos oponentes nuevos y viejos, ¿hay alguien en particular contra quien quieras pelear?

Dedede se llevó una mano a la barbilla, pensativo, antes de sonreír con una sonrisa cómplice hacia el altavoz. Por supuesto, el comentarista supo de inmediato lo que Dedede quería decir.

—Claro. No hay nadie que adore arruinarle la tarde a Kirby tanto como tú.

El Rey Dedede rió, antes de poner su martillo boca abajo y hacer con sus manos un gesto como si crease una mandíbula, antes de tomar su martillo y hacer como que golpeaba el suelo, nuevamente sonriendo con confianza.

—Ah, así que también deseas deshacerte de King K. Rool, ¿eh? Parece que al fin los Kong y Bowser no son los únicos en contra del rey de los kremlings. ¡Pues mucha suerte en la batalla, Rey Dedede!

Combatiente 40: Olimar

—¡Y aquí tenemos al intrépido capitán de Hocotate, el explorador intergaláctico... Olimar! —anunció el comentarista mientras el pequeño astronauta caminaba hacia el centro de la sala, con un séquito de Pikmin siguiéndolo de cerca.

Olimar saludó con una leve inclinación de cabeza, mientras los Pikmin a su alrededor se organizaban en filas. Uno rojo levantó los brazos en forma de "V", como si estuviera celebrando.

—¡Siempre un gusto verte por aquí, capitán! Sabemos que, aunque eres pequeño, no hay que subestimarte. Tu dominio de los Pikmin es impresionante. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición del torneo?

Olimar se cruzó de brazos pensativamente. Un Pikmin amarillo se puso en su cabeza e hizo una pose de “pensador”, mientras otro Pikmin azul formó un gesto de "dedo arriba" con sus hojas.

—¡Eso suena a confianza y determinación! Sabemos que los Pikmin son tu gran fortaleza en combate. ¿Tienes alguna estrategia nueva para sorprender a tus oponentes?

Un grupo de Pikmin morados flexionaron sus pequeños brazos, mientras que dos blancos giraban en círculos rápidamente, como si estuvieran tramando algo astuto. Olimar asintió con calma.

—¡Interesante! Parece que planeas una combinación de fuerza y velocidad. Seguro que tus oponentes tendrán que pensar bien cómo enfrentarte.

Olimar señaló a sus Pikmin, y estos rápidamente formaron la silueta de un casco con un rayo encima.

—¡Ah! ¿Quieres enfrentarte a Samus? —dedujo el comentarista—. ¡Eso sería un duelo fascinante! La cazarrecompensas espacial contra el explorador intergaláctico y su ejército de Pikmin. ¿Qué te motiva a querer esa pelea?

Un Pikmin rojo hizo como si disparara con una pistola imaginaria, mientras otro azul rodaba por el suelo antes de ponerse de pie de un salto. Olimar asintió con determinación.

—¡Ah, quieres probar qué tan bien puedes adaptarte contra un oponente con un arsenal tan poderoso! Eso suena a un enfrentamiento táctico increíble.

Los Pikmin celebraron alrededor de Olimar, formando un círculo y saltando de emoción.

—¡Pues mucha suerte, Capitán Olimar! Sabemos que con tu ingenio y la ayuda de tus fieles Pikmin, seguro darás una gran batalla.

Combatiente 41: Lucario

—¡Y ahora, directo desde las montañas más recónditas, el aura viviente en su máxima expresión... ¡Lucario! —anunció el comentarista mientras la sala se iluminaba con un tenue resplandor azul.

Lucario entró con paso firme y mirada serena, su cuerpo emanando un aura tranquila pero poderosa. Cruzó los brazos y asintió levemente en reconocimiento al presentador.

—Siempre es un placer tenerte en el torneo, Lucario. Eres conocido por tu capacidad de adaptación en combate y por volverte más fuerte cuanto más daño recibes. ¿Cómo te sientes en esta nueva edición?

Lucario cerró los ojos por un momento, tomando una profunda inhalación antes de responder con voz grave, mesurada y telepática.

—El aura me guía. Mi entrenamiento ha sido constante, y mi espíritu está en armonía. Estoy preparado para cualquier desafío.

—¡Eso es lo que nos gusta escuchar! Tu estilo de lucha es único y difícil de predecir. ¿Dirías que has desarrollado nuevas técnicas para este torneo?

Lucario entrecerró los ojos, su aura intensificándose ligeramente alrededor de sus patas y hombros.

—La evolución es natural en el combate. Mi control del aura ha alcanzado un nuevo nivel... pero mis oponentes lo descubrirán por sí mismos.

—Interesante... y dime, ¿hay algún oponente en particular contra el que quieras probar tu poder?

Lucario cerró los ojos por un momento, meditando la respuesta. Luego, con un brillo determinado en sus ojos rojos, respondió:

—Greninja.

—¡Vaya, vaya! ¡Un enfrentamiento entre dos maestros de la velocidad y la técnica! ¿Por qué Greninja?

Lucario bajó ligeramente la cabeza, su expresión volviéndose más analítica.

—Ambos somos veloces. Ambos dependemos de la precisión. Pero mientras él se mueve como la sombra, yo soy la luz que la atraviesa. Quiero medir mi aura contra su instinto.

—¡Eso suena a un combate electrizante! —exclamó el comentarista—. ¡Dos combatientes que dependen de su agilidad y reflejos, con estilos completamente opuestos!

De pronto, el comentarista hizo una pausa por un momento y frunció el ceño.

—Hmm... ¿soy solo yo o tu voz me suena terriblemente familiar?

Lucario simplemente sonrió, guardando silencio.

—Meh. Debe ser mi imaginación.

Combatiente 42: R.O.B.

—No... tengo idea de cómo presentarte, R.O.B. —admitió el comentarista, algo incómodo.

El robot, por su parte, permaneció quieto en su sito, parpadeando y ladeando la cabeza confundido.

—Has estado en Smash durante tres torneos consecutivos. Es bueno verte, aunque... Sin ofender, pero no comprendo qué haces aquí.

Los dos brazos mecánicos de R.O.B. se movieron de arriba a abajo lentamente, como si imitara un encogimiento de hombros, luego el robot se giró a la salida y se fue.

—Bueno, eso fue... algo.

Combatiente 43: Toon Link

—¡Y ahora, directo desde los mares más peligrosos, el espadachín de los vientos y el héroe de las olas... ¡Toon Link! —anunció el comentarista con entusiasmo mientras el joven hyliano entraba en la sala con pasos ágiles y expresión despreocupada.

Toon Link saludó con una sonrisa traviesa antes de sacar su batuta del viento y agitarla en el aire, como si dirigiera una orquesta invisible.

—¡Siempre es un placer verte por aquí, marinero! Eres uno de los luchadores más versátiles de este torneo, con un estilo de combate rápido y técnico. ¿Cómo te sientes para esta edición?

—¡Más preparado que nunca! —dijo Toon Link, sonriendo con confianza.

—¡Eso es actitud! Sabemos que eres un experto con la espada y el arco, pero tu arsenal de bombas siempre sorprende a tus oponentes. ¿Has estado practicando alguna nueva estrategia?

El joven hyliano sacó una bomba de su bolsa, la miró por un momento y luego la guardó rápidamente con una sonrisa misteriosa. Luego, levantó su escudo y dio un pequeño golpe en su espada enfundada, como indicando que estaba listo para cualquier desafío.

—¡Parece que estás guardando algunas sorpresas bajo la manga! Y dime, ¿hay algún oponente contra quien te gustaría medirte?

—¡Mis otros yo! —respondió. Al parecer variaba entre hablar con expresiones o palabras.

—¡Ja, ja! ¿Así que quieres enfrentarte a tus otras versiones? ¡Eso suena a un duelo entre generaciones! ¿Por qué ellos?

Toon Link hizo un gesto de comparación entre su propia estatura, la de Link y la de Link Niño, luego cruzó los brazos con una expresión orgullosa, como si intentara decir que, aunque más pequeño, tenía mucho que demostrar.

—¡Eso sí que es confianza! Un duelo entre tú y Link será una batalla de estilos, de agilidad contra fuerza, de la experiencia contra el ingenio.

Combatiente 44: Wolf

—¡Y ahora, desde los rincones más oscuros de la galaxia, el líder despiadado del Escuadrón Star Wolf… ¡Wolf O'Donnell! —anunció el comentarista con tono dramático mientras Wolf ingresaba con paso firme y mirada afilada.

El lobo plateado se cruzó de brazos, su cola agitándose lentamente detrás de él. Su sonrisa era burlona, confiada, y sus ojos brillaban con un destello desafiante.

—¡Siempre es un espectáculo verte en acción, Wolf! Eres uno de los combatientes más agresivos y letales del torneo. ¿Cómo te sientes en esta edición?

Wolf bufó y alzó una ceja.

—¿Cómo me siento? Tch, como siempre: listo para cazar.

—¡Eso es lo que queremos escuchar! Eres conocido por tu velocidad, tu brutalidad en combate y, por supuesto, tu icónica patada. ¿Tienes alguna nueva táctica bajo la manga esta vez?

Wolf chasqueó los dedos, y su garra metálica brilló bajo la luz.

—No necesito trucos nuevos. Cuando eres el depredador, solo necesitas afilar las garras.

—¡Qué respuesta tan feroz! Ahora, dime, ¿hay algún oponente en particular contra el que estés ansioso por pelear?

Wolf rió entre dientes, dejando ver sus colmillos.

—¿En serio me preguntas eso? Ya sabes la respuesta.

—¡Ohhh, claro que sí! ¡Quieres enfrentarte a Fox McCloud una vez más!

Wolf se encogió de hombros con una sonrisa socarrona.

—Siempre es divertido darle una lección al cachorro. Además, no estuve aquí el último torneo —añadió, tronando sus nudillos—. Esa peste de Star Fox y yo tenemos cuentas pendientes.

—¡Eso sí que será una batalla épica! Tu eterno rival, el líder de Star Fox. ¿Crees que esta vez podrás superarlo?

—Tch, qué pregunta tan estúpida. Él debería preguntarse si puede superarme.

Combatiente 45: Aldeano

—¡Y ahora, desde una apacible aldea donde la vida es tranquila… pero el combate no lo es, llega el misterioso y estoico… ¡Aldeano! —anunció el comentarista con una mezcla de entusiasmo y cautela.

El Aldeano entró con su característico andar despreocupado, sus ojos redondos e inexpresivos ocultando cualquier posible emoción. En sus manos llevaba una bolsita con nabos, que sacudió ligeramente antes de guardarlos de nuevo en su bolsillo.

—Siempre es interesante verte en acción, Aldeano. No eres el luchador más grande, pero tu estilo de combate es… único, por decirlo de alguna manera. ¿Cómo te sientes para este torneo?

El Aldeano simplemente sonrió. No dijo una palabra.

—…Esa es una respuesta inquietante —comentó el presentador, aclarando la garganta—. Sabemos que utilizas herramientas y objetos cotidianos en batalla, pero eres capaz de convertir cualquier cosa en un arma peligrosa. ¿Tienes algún truco nuevo preparado?

El Aldeano sacó una pala de la nada, cavó un pequeño hoyo en el suelo, lo observó fijamente, y luego lo cubrió con la misma calma. Luego sacó un globo y lo dejó flotar lentamente.

—…No sé si eso fue una demostración de estrategia o una amenaza velada, pero en cualquier caso, estoy intrigado —dijo el presentador, sudando un poco—. ¿Hay algún oponente contra el que te gustaría pelear en especial?

El Aldeano sacó un papel y dibujó una silueta de un luchador con orejas puntiagudas y una gran pistola. Luego le dibujó una "X" encima.

—¡Oh! ¿Quieres enfrentarte a Fox McCloud?

El Aldeano asintió lentamente, su sonrisa apenas cambiando.

—¿Y por qué Fox? ¿Tienes algún problema con Star Fox?

El Aldeano sacó un tirachinas y disparó una piedrita al aire antes de volver a guardarlo. Luego, simplemente sacó una caña de pescar y esperó.

—…Sigo sin entenderlo del todo, pero parece que estás muy seguro de ello.

El Aldeano inclinó la cabeza ligeramente, como si la pregunta misma fuera irrelevante.

—Bueno… en cualquier caso, será interesante verte en acción. ¡Buena suerte en el torneo, Aldeano… y por favor, no entierres a nadie en el escenario!

El Aldeano parpadeó lentamente, como si el comentario ni siquiera lo afectara, y luego se retiró tranquilamente, dejando una sensación de incomodidad en el aire.

—...No sé por qué, pero siento que alguien va a desaparecer misteriosamente después de este torneo.

Combatiente 46: Mega Man

—¡Oh, es sin dudas emocionante volver! —dijo Rock con una sonrisa—. Después del último torneo, la verdad quedé con ganas de más.

—¡Y nosotros con ganas de verte en acción otra vez, Mega Man! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Eres un luchador versátil, con un arsenal de habilidades impresionante. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

Rock cruzó los brazos y asintió con determinación.

—Listo para el desafío. He estado entrenando con nuevos esquemas de batalla y mejorando mis sistemas.

—¡Eso suena a que vienes con sorpresas! Sabemos que puedes adaptarte a cualquier situación gracias a tus habilidades copiadas. ¿Tienes alguna nueva táctica para este torneo?

Mega Man levantó su brazo cañón y lo transformó rápidamente en diferentes armas: el Metal Blade, el Leaf Shield y el Spark Shock. Luego volvió a su forma normal con una pequeña sonrisa.

—Siempre hay algo nuevo por probar. Pero lo importante es cómo lo uso en combate.

—¡Genial! ¡Eso sí que es un verdadero robot de combate!

Combatiente 47: Entrenadora de Wii Fit

—Fue... inesperado el ser invitada una vez más —confesó la entrenadora, quien aún estando sentada parecía estar posando como cuando instruye normalmente—. Pero estoy feliz de saber que dejé una buena impresión el torneo anterior para volver.

—¡Definitivamente dejaste una gran impresión! —afirmó el comentarista con entusiasmo—. Tu estilo de combate es único: equilibrado, preciso y lleno de técnicas saludables. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición del torneo?

La Entrenadora de Wii Fit cerró los ojos por un momento, tomó aire y exhaló con calma antes de responder.

—Centrada. Relajada. Lista para dar lo mejor de mí.

—¡Eso suena como la mentalidad perfecta para la competencia! Sabemos que dominas posturas y ejercicios que fortalecen tanto el cuerpo como la mente. ¿Has desarrollado nuevas estrategias para este torneo?

La entrenadora se puso de pie en un solo movimiento fluido y ejecutó una pose de árbol con una estabilidad impecable.

—La clave del éxito es la consistencia. Pero también hay que adaptarse... y sorprender.

—¡Interesante! Seguro que tus oponentes tendrán que pensar dos veces antes de subestimarte.

Combatiente 48: Rosalina y Destello

—Es un deleite estar de regreso —comentó Rosalina con una sonrisa serena, mientras que su destello bailaba alegremente alrededor de ella, haciéndole reír—. Mis destellos nunca habían estado tan entusiasmados de ser parte de algo. Creo que les gustó estar aquí la última vez.

—¡Y no es para menos! —exclamó el comentarista con alegría—. Tu gracia y dominio del cosmos dejaron una gran impresión en el torneo anterior. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

Rosalina extendió su mano, y su Destello flotó hacia ella, girando con emoción.

—Tranquila. El universo está en constante cambio, y así también lo hacemos nosotros. Esta vez, hemos aprendido mucho más.

—¡Eso es increíble! Sabemos que tienes un estilo de combate poco convencional, donde combates en sincronía con tus Destellos. ¿Han desarrollado alguna nueva estrategia para sorprender a tus oponentes?

Rosalina miró a su Destello, quien asintió con entusiasmo antes de girar a su alrededor con destellos de luz cósmica.

—Hemos perfeccionado nuestra conexión. Cuando luchamos, no somos dos entidades separadas... sino una sola constelación en movimiento.

—¡Eso suena tan elegante como peligroso! Seguro que tus oponentes encontrarán difícil romper esa sinergia.

Combatiente 49: Little Mac

—¿Me invitan a un combate y piensan que no voy a volver? ¡Pues se equivocaron! —dijo el joven Mac, quien parecía listo para saltar a un ring de boxeo incluso a pesar de estar sentado—. El torneo anterior me dejó enfrentar a combatientes formidables. ¡Espero que este no sea menos!

—¡Eso es la actitud de un verdadero luchador! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Sabemos que en el último torneo demostraste que, aunque vienes del ring de boxeo, eres capaz de enfrentarte a cualquier rival, sin importar su tamaño o habilidades. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

Little Mac golpeó sus guantes entre sí y sonrió con confianza.

—Más fuerte, más rápido, más decidido. Mi entrenador y yo hemos estado trabajando en mi velocidad y resistencia. Esta vez, nadie me detendrá.

—¡Eso suena a que has estado entrenando duro! Eres conocido por tu increíble fuerza en el combate cuerpo a cuerpo, pero tu punto débil es la pelea aérea. ¿Has trabajado en eso?

Mac bufó y se encogió de hombros.

—Vamos, todos saben que no soy un saltarín. Pero si alguien cree que eso me hace débil, que se acerque lo suficiente... y lo mando al suelo de un solo golpe.

—¡Esa es confianza de campeón!

Combatiente 50: Greninja

—Ninja —comentó el Pokémon, sus brazos cruzados y sus ojos cerrados mientras su "bufanda"—que en realidad es su lengua—se movía con un viento invisible.

—¡El sigiloso maestro de la velocidad y la técnica ha llegado! —anunció el comentarista con emoción—. Greninja, tu agilidad y letalidad te han convertido en un combatiente temido. ¿Cómo te sientes para este torneo?

Greninja abrió los ojos lentamente, su mirada afilada reflejando determinación.

—Ninja —repitió, con un tono que dejaba claro que estaba completamente preparado.

—¡Eso sí que es confianza! Eres conocido por moverte como una sombra y atacar con precisión quirúrgica. ¿Has estado practicando nuevas tácticas para esta edición?

Greninja desapareció en una nube de agua y reapareció detrás del comentarista en un abrir y cerrar de ojos. Luego, formó una shuriken de agua en su mano y la lanzó al aire antes de atraparla con suavidad.

—...Voy a tomar eso como un sí —comentó el presentador, riendo nervioso.

Combatientes 51-53: Peleador, Espadachín y Tiradora Mii

—¡Oh, vaya! —dijo el comentarista, genuinamente impresionado al ver a los Mii entrar y verse... completamente renovados.

El peleador, aunque aún vestía de rojo, usaba un traje de látex y protecciones en sus rodillas, botas, codos e incluso sus puños. El espadachín iba por un camino similar, solo que su vestimenta era más medieval y de color azul. Finalmente, la tiradora parecía usar vestimenta futurista. Los tres tenían una cosa en común: un cinturón dorado con la palabra "Mii" grabada en medio.

—Es un gusto estar de regreso —dijo el peleador primero, cruzándose de brazos—. Tuvimos que hacer unos cuantos cambios a nuestros atuendos.

—¡Sí! Si vamos a ser parte del torneo más grande de todos los mundos... —continuó el espadachín, antes de desenvainar y apuntar su espada al cielo—. ¡Hay que vernos presentables!

La tiradora rodó los ojos aunque sonreía aún.

—Estos dos insistieron en un cambio de look para el nuevo torneo. ¿Y la verdad? Es probablemente la única buena idea que han tenido hasta ahora.

—¡Y vaya que lo lograron! —comentó el presentador con entusiasmo—. ¡Se ven increíbles! Pero lo más importante aquí es: ¿qué han estado haciendo para prepararse para este torneo?

El Peleador Mii golpeó sus puños entre sí y sonrió con confianza.

—Hemos estado entrenando sin descanso. Ahora somos más fuertes, más rápidos y más estratégicos.

—¡Exacto! —intervino el Espadachín Mii, girando su espada con destreza—. Nos dimos cuenta de que en el torneo anterior había muchas áreas en las que podíamos mejorar, así que nos enfocamos en perfeccionar nuestras técnicas.

La Tiradora Mii suspiró, aunque su expresión mostraba determinación.

—Yo diría que ellos dos se obsesionaron un poco... pero admito que me uní a los entrenamientos. No podía quedarme atrás.

—¡Eso es lo que me gusta escuchar! —dijo el comentarista con entusiasmo—. En el torneo pasado, demostraron que los Mii son combatientes dignos de respeto. ¿Tienen algún objetivo en mente para esta edición?

El Peleador Mii sonrió con confianza.

—Ganar.

El Espadachín Mii apuntó su espada hacia adelante.

—Sorprender a todos.

La Tiradora Mii cargó su bláster y lo hizo girar en su mano.

—Demostrar que no somos solo avatares de fondo.

—¡Oh, eso sí que es actitud! —exclamó el presentador—. ¡No puedo esperar a verlos en acción!

Combatiente 54: Palutena

—¡Es todo un honor haber sido incluida en una ocasión tan especial! —comentó la gobernadora de la Tierra de los Ángeles con una sonrisa calmada—. A pesar de haberme unido recientemente en el torneo pasado, me complace saber que he sido considerada para regresar.

—¡Y vaya que fuiste considerada! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Palutena, eres una diosa con un estilo de combate que combina gracia y poder divino. En el torneo anterior, tu capacidad para controlar el campo de batalla con magia y estrategia dejó a todos impresionados. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

Palutena inclinó ligeramente la cabeza y cerró los ojos con una expresión tranquila.

—Me siento en armonía con el flujo del destino —dijo con serenidad, antes de abrir los ojos con un destello de picardía—. Pero también lista para demostrar que los dioses pueden ser tanto sabios como formidables.

—¡Eso sí que es confianza divina! Sabemos que tu estilo de combate es versátil: puedes atacar desde la distancia con magia o enfrentarte de cerca con tu báculo. ¿Has desarrollado nuevas estrategias para este torneo?

La diosa giró su báculo entre sus dedos con elegancia antes de apoyarlo en el suelo.

—Siempre hay espacio para mejorar. Digamos que he afinado mis reflejos y aprendido algunos trucos nuevos que podrían sorprender a más de uno.

—¡Vaya, eso suena prometedor! Seguro que más de un combatiente deberá estar alerta cuando te enfrente.

Palutena rió suavemente, llevando una mano a su mejilla con una expresión juguetona.

—Bueno, no sería divertido si todo fuera predecible, ¿no?

—¡Definitivamente no! —afirmó el comentarista—. ¡No puedo esperar para verte en acción una vez más, diosa de la luz!

Combatiente 55: Pac-Man

—¡Es increíble haber regresado! —dijo Pac-Man con entusiasmo, saltando sobre la silla—. Casi estaba seguro de que esta vez no me invitarían, ¡pero me alegra haberme equivocado!

—¡Por supuesto que tenías que regresar! —exclamó el comentarista con emoción—. Pac-Man, eres una verdadera leyenda de los videojuegos, un ícono que ha trascendido generaciones. En el torneo anterior, tu estilo de combate, lleno de creatividad y nostalgia, sorprendió a muchos. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?  

Pac-Man se cruzó de brazos con una gran sonrisa y asintió con energía.  

—¡Listo y hambriento de acción!  

El comentarista soltó una carcajada.  

—¡Ja, ja! ¡Eso suena muy apropiado! Eres conocido por utilizar tus icónicos Power Pellets, frutas y otros elementos de tu mundo en batalla. ¿Has preparado alguna estrategia nueva para sorprender a tus rivales esta vez?  

Pac-Man infló sus mejillas y luego las desinfló, como si estuviera considerando su respuesta. Finalmente, mostró su clásica sonrisa antes de hacer un giro rápido en el aire.  

—Digamos que he estado practicando nuevos movimientos y... digamos que algunas frutas pueden ser más peligrosas de lo que parecen.  

—¡Eso sí que suena intrigante! Seguro que más de uno tendrá que pensar dos veces antes de subestimarte.  

Pac-Man dio un par de saltos y levantó un pulgar.  

—¡Y no olvides que siempre tengo una última carta bajo la manga… o bajo la lengua!  

—¡Eso sí que es confianza! —afirmó el comentarista—. ¡Estoy seguro de que darás un espectáculo digno de una leyenda!

Combatiente 56: Robin

—Estoy complacido de volver —dijo el mago táctico con una pequeña sonrisa—. Saber que Lucina también ha vuelto, y que Chrom se nos une en esta ocasión, me llena de gozo.

—¡Eso es fantástico! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Robin, eres un estratega nato, un combatiente que combina el poder de la magia con el filo de la espada. En el torneo anterior, sorprendiste a muchos con tu capacidad para adaptarte a cualquier situación. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

El estratega cerró los ojos por un momento, como si analizara su respuesta con la misma precisión con la que trazaría un plan de batalla. Luego, asintió.

—Preparado. Como cualquier buen estratega, he estudiado el terreno y a mis posibles oponentes. Cada combate es un rompecabezas, y estoy listo para resolverlo.

—¡Eso sí que es pensar como un verdadero táctico! Sabemos que utilizas tanto la espada Levin como poderosos tomos de magia. ¿Has desarrollado nuevas estrategias o mejorado tus técnicas para este torneo?

Robin levantó su mano y un pequeño destello de energía surgió de su palma, tomando la forma de varios símbolos arcanos antes de desvanecerse.

—Digamos que he reforzado mi conocimiento en los antiguos tomos. Mis hechizos son más precisos, más letales… y esta vez me aseguraré de que mis recursos duren lo suficiente.

—¡Vaya, eso suena a que veremos a un Robin más eficiente en la administración de su magia!

Combatiente 57: Shulk

—¡Claro que se siente increíble haber regresado! —comentó el portador del Monado con una sonrisa—. Es incluso mejor saber que esta vez no seré el único combatiente de mi mundo.

—¡Eso es cierto! —exclamó el comentarista con emoción—. Shulk, en el torneo anterior, mostraste una destreza impresionante con el Monado, combinando estrategia, velocidad y potencia con tus artes. Ahora que regresas y con más aliados de tu mundo, ¿cómo te sientes para esta nueva edición?  

El joven de los Homs cruzó los brazos y asintió con determinación.  

—Motivado. La primera vez que participé, tuve que enfrentarme solo a muchos luchadores con habilidades asombrosas. Pero esta vez… bueno, no me confiaré, pero me siento más preparado.

—¡Esa es la actitud de un verdadero guerrero! Tu habilidad para cambiar entre diferentes Artes del Monado te hace uno de los combatientes más versátiles. ¿Has estado entrenando nuevas tácticas para este torneo?  

Shulk sonrió y desenfundó el Monado, haciendo que su hoja brillara con energía roja.  

—He estado experimentando con nuevas combinaciones de Artes y tiempos de activación. Si alguien cree que ya conoce mi estilo, se llevará una sorpresa.  

—¡Vaya, eso suena peligroso para tus oponentes! Como alguien que puede ver el futuro en combate, ¿crees que eso te dará ventaja esta vez?  

Shulk cerró los ojos por un instante antes de abrirlos con seguridad.  

—El futuro no está escrito en piedra. Pero si tengo algo que decir al respecto… me aseguraré de que sea uno donde yo me alce con la victoria.  

—¡Eso sí que es determinación! ¡No puedo esperar para verte en acción, Shulk!

Combatiente 58: Bowser Jr.

—¡Es asombroso volver! —exclamó el joven príncipe de los koopa con una sonrisa maliciosa—. Y esta vez, ¡no pienso caer del escenario de combate hasta mostrarle a todos porque soy el futuro rey de los koopas!

—¡Esa es la confianza de un verdadero aspirante a la realeza! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Bowser Jr., en el torneo anterior demostraste que, aunque eres joven, tienes una gran destreza en combate. Tu combinación de habilidades con el Koopa Clown Car, tus gadgets y tu astucia te convirtieron en un rival difícil de enfrentar. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

Bowser Jr. se cruzó de brazos y mostró una sonrisa engreída.

—¡Más listo que nunca! He estado entrenando con papá y con los Koopalings, y ahora soy más rápido, más fuerte… ¡y más molesto para mis oponentes!

—¡Ja, ja! ¡Eso sí que es algo que te caracteriza! Tu estilo de combate es caótico pero efectivo. ¿Has trabajado en alguna estrategia nueva para esta edición?

El pequeño koopa golpeó el panel del Koopa Clown Car, que comenzó a parpadear con luces de colores antes de hacer girar su taladro.

—¡Oh, claro que sí! He mejorado mis juguetes y afinado mis trucos. ¡Algunos de ellos van a hacer que mis rivales salgan volando antes de que se den cuenta!

—¡Eso suena peligroso! Seguro que más de uno tendrá que estar atento a tus travesuras.

Combatiente 59: Duck Hunt

El perrito de Duck Hunt ladró entusiasmado hacia el altavoz, moviendo la cola con su lengua afuera mientras que el pato en su espalda graznaba.

—¡Y aquí están los luchadores más inesperados pero sin duda más icónicos! —exclamó el comentarista con una sonrisa—. ¡Duck Hunt, el dúo dinámico de la caza y la travesura! En el torneo anterior sorprendieron a muchos con su estilo de combate único, lleno de referencias clásicas y ataques impredecibles. ¿Cómo se sienten para esta nueva edición?

El perro ladró nuevamente y sacó el pecho con orgullo, mientras el pato aleteaba y graznaba, como si respondiera con entusiasmo.

—¡Eso es espíritu de combate! Ustedes combinan trabajo en equipo con ataques estratégicos basados en el viejo oeste y los arcades. ¿Han preparado algo especial para este torneo?

El perro soltó su icónica risa burlona antes de hacer un pequeño giro y señalar al pato con la pata, como si dijera que su compañero era la clave del plan. El pato, por su parte, infló el pecho y extendió sus alas con confianza.

—¡Vaya, eso sí que es confianza en su sincronización! Bueno, seguro que sus rivales deberán estar preparados para sus trucos y travesuras.

El perro ladró una vez más antes de dar un pequeño salto de emoción, mientras el pato graznaba en señal de acuerdo.

Combatiente 60: Ryu

—¡Oh, vaya, vaya! —dijo el comentarista con admiración—. Si hablamos de verdaderos combatientes, ¡tú eres uno de los más legendarios! Ryu, en el torneo anterior demostraste que el arte del Ansatsuken es tan letal como honorable. ¿Cómo te sientes para esta nueva edición?

Ryu cerró los ojos un momento y asintió con determinación.

—Preparado. Siempre en busca de mejorar, siempre en busca del siguiente desafío.

—¡Eso sí que es la mentalidad de un verdadero artista marcial! Eres conocido por tu disciplina, tu dominio del combate cuerpo a cuerpo y tus ataques icónicos como el Hadoken y el Shoryuken. ¿Has trabajado en algo nuevo para este torneo?

El peleador giró los hombros para relajarlos y apretó los puños.

—Siempre hay margen de mejora. He refinado mi técnica, fortalecido mi espíritu y mejorado mi control sobre el poder del Satsui no Hado. Pero mi meta sigue siendo la misma: enfrentarme a los mejores y superarme a mí mismo.

—¡Esa es la esencia de un verdadero luchador! Sin duda, todos estarán atentos a lo que puedes hacer en el torneo.

Combatiente 60Ԑ: Ken

—¡Ja! ¡¿Creían que me iban a dejar fuera?! —exclamó Ken Masters con una gran sonrisa—. ¡Si Ryu está aquí, no podía faltar yo! Menos mal me invitaron esta vez. Que sea mi primer torneo en Smash no lo hace menos emocionante.

—¡Y vaya que es emocionante! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Ken, eres un ícono de los juegos de lucha, un combatiente feroz con un estilo explosivo y lleno de energía. Aunque esta es tu primera vez en el torneo, todos sabemos que tu experiencia y habilidades te convierten en un rival formidable. ¿Cómo te sientes al unirte a la contienda?

Ken se cruzó de brazos con una sonrisa confiada.

—Emocionado. He peleado contra muchos oponentes fuertes en mi vida, pero este torneo es una oportunidad única. No podía dejar que Ryu se llevara toda la diversión sin mí.

—¡Eso sí que es espíritu competitivo! Sabemos que tu estilo de combate es similar al de Ryu, pero con tu propio toque más agresivo y dinámico. ¿Has preparado algo especial para esta ocasión?

El rubio peleador golpeó sus nudillos con la palma de la mano antes de sonreír con determinación.

—Digamos que mi velocidad y mis patadas van a hacer que más de uno se lo piense dos veces antes de acercarse demasiado. Y créeme, cuando lance un Shoryuken, no será solo para lucirme.

—¡Eso sí que es confianza! Seguro que los demás competidores estarán atentos a tu estilo de pelea.

Ken asintió y señaló con el pulgar hacia sí mismo.

—No esperaría menos. ¡Voy a dar un espectáculo que nadie olvidará!

—¡Eso es lo que queremos ver! ¡Bienvenido al torneo, Ken!

Combatiente 61: Cloud

—Mentiría si dijese que estoy feliz de volver... —Cloud dijo fríamente, cruzado de brazos con una expresión casi indescifrable—. Quisiera sentirme honrado como otros combatientes, pero es difícil cuando alguien que vive de hacer tu vida un infierno también es parte del torneo.

—Ah, sí... Olvidé que tú y Sephiroth tienen su historia —el comentarista rió nervioso—. De todos modos, parece ser más civilizado que la mayoría de los villanos del torneo. Espero que, si tienen asuntos que arreglar, lo dejen para el campo de batalla.

Cloud cerró los ojos por un instante, como si meditara la respuesta, antes de exhalar pesadamente.

—No necesito que me lo recuerden —respondió con tono seco—. Si él cruza mi camino, me aseguraré de que lo lamente.

El comentarista carraspeó, sintiendo la tensión en el aire, pero decidió desviar el tema con un poco más de entusiasmo.

—Bueno, dejando eso de lado, ¡Cloud, eres uno de los espadachines más temidos del torneo! En la edición pasada, tu velocidad, alcance y poder con la Buster Sword dejaron una gran impresión. ¿Cómo te sientes de cara a esta nueva competencia?

Cloud abrió los ojos y miró al entrevistador con su usual semblante serio.

—Fuerte. No vine aquí para hacer amigos ni para disfrutar el espectáculo. Voy a hacer lo que siempre hago: pelear y ganar.

—¡Vaya, eso sí que es determinación! Sabemos que tu Límite puede cambiar el ritmo de una batalla en un instante. ¿Has estado entrenando nuevas estrategias para sorprender a tus rivales?

Cloud sostuvo la Buster Sword con una mano, descansándola sobre su hombro.

—El Límite es solo una herramienta. No se trata de confiar en una ventaja, sino de saber cuándo usarla. Pero sí… he estado refinando mi técnica. No tengo intención de repetir los mismos errores.

—¡Eso suena a que veremos a un Cloud aún más letal en combate!

Combatiente 62: Corrin

—Me siento honrada de estar de vuelta —dijo Corrin con una sonrisa calmada—. La última vez sentí que llegué demasiado tarde al evento. ¡Me alegra de que esta vez no se así!

—¡Y qué bueno que regresaste! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Corrin, eres una combatiente única, con la capacidad de transformarte en un dragón y un estilo de lucha versátil que combina ataques de espada con feroces instintos dracónicos. En la edición pasada, sorprendiste a muchos con tu alcance y movilidad. ¿Cómo te sientes para esta nueva oportunidad?

Corrin asintió suavemente, llevando una mano a su pecho.

—Preparada. La última vez aprendí mucho enfrentándome a guerreros de todo tipo, y esta vez quiero aprovechar ese conocimiento al máximo.

—¡Eso es lo que queremos escuchar! Tu habilidad de alternar entre ataques de espada y transformaciones dracónicas te hace una oponente impredecible. ¿Has trabajado en alguna nueva estrategia para este torneo?

La semidragón extendió su mano y dejó que pequeñas escamas aparecieran en su brazo antes de desvanecerse, demostrando un control más refinado sobre su poder.

—He aprendido a ser más eficiente con mis ataques y aprovechar mejor mi transformación. Esta vez, no dejaré que nadie me tome por sorpresa.

—¡Vaya! ¡Eso suena a que veremos a una Corrin aún más peligrosa en la arena!

Combatiente 63: Bayonetta

—Oh, claro que es lindo regresar —la Bruja de Umbra dijo en tono coqueto—. Después de todo, parece que dejé una buena impresión cuando me uní el torneo pasado.

—¡Y vaya que lo hiciste! —exclamó el comentarista con una risa animada—. Bayonetta, eres una de las combatientes más elegantes y letales del torneo. Tu estilo de combate, que combina artes marciales con magia demoníaca, dejó una marca imborrable en la edición anterior. ¿Cómo te sientes de cara a esta nueva competencia?

Bayonetta chasqueó los dedos, haciendo aparecer brevemente un par de mariposas púrpuras a su alrededor antes de posar una mano en su cadera con una sonrisa confiada.

—Oh, cariño, ¿realmente necesitas preguntarlo? Estoy más que lista para bailar en la arena y hacer que mis oponentes se lo piensen dos veces antes de desafiarme.

—¡Eso sí que es confianza! Sabemos que tu habilidad para ralentizar el tiempo con el Witch Time y tus combos fluidos te hacen una rival temible. ¿Has estado preparando algo nuevo para esta edición?

Bayonetta ajustó sus gafas y dejó escapar una pequeña risa.

—Digamos que he perfeccionado algunos movimientos y afinado mis invocaciones. No sería divertido si todo fuera predecible, ¿verdad?

—¡Definitivamente no! Seguro que más de un combatiente deberá estar atento a tus hechizos y a tus movimientos letales.

La bruja de Umbra giró sobre sus talones con elegancia antes de lanzar un beso al aire.

—Solo espero que puedan seguirme el ritmo.

—¡Eso sí que es un desafío! ¡No podemos esperar para verte en acción, Bayonetta!

Combatiente 64: Inkling

—Oh, parece que ya solo quedan los nuevos combatientes por presentar —señaló el comentarista al notar a la Inkling, de pelo naranja, entrar a la sala y emitir extraños sonidos que nadie podía entender—. En ese caso, ¡bienvenida, Inkling! Vienes directamente del mundo de Splatoon, donde las batallas de tinta son el pan de cada día. Pero aquí en Smash Bros., las reglas son un poco diferentes. ¿Cómo te sientes al entrar en esta contienda?

La Inkling inclinó la cabeza con curiosidad, mostrando una gran sonrisa. Aunque su lenguaje era incomprensible para la mayoría de los presentes, su energía hablaba por sí sola. Con un rápido movimiento, sacó su Lanzatintas y apuntó al suelo, rociando una pequeña cantidad de tinta naranja a modo de demostración.

—¡Brrrah! —exclamó animada, haciendo un gesto de victoria.

El comentarista rió.

—¡Bueno, eso suena a confianza! Sabemos que tienes un estilo de lucha único, combinando agilidad con ataques basados en tinta. Tu capacidad de moverte rápidamente en el suelo cubierto de tinta te da una ventaja increíble. ¿Crees que los demás combatientes podrán seguirte el ritmo?

La Inkling se llevó una mano a la barbilla en un gesto pensativo antes de soltar una risita burlona. Luego, con un movimiento veloz, sacó un Rodillo de tinta y lo arrastró por el suelo en un gesto desafiante.

—¡Woomy! —exclamó con entusiasmo.

—¡Eso sí que es una declaración de intenciones! Se nota que vienes preparada para pintar la arena con el estilo de los Inklings. Y con armas como los Derramatic, el Cargatintas y las devastadoras bombas de tinta, seguro que pondrás en aprietos a más de uno.

Combatiente 65: Ridley

El comandante de los Piratas Espaciales rugió tan fuerte que hizo vibrar el suelo. Se supone que él no debía entrar a Smash por ser muy grande, pero... parece ser que alguien ajustó su tamaño lo suficiente para hacerle entrar.

El comentarista tragó saliva con nerviosismo antes de recuperar la compostura.

—¡Vaya, vaya! Si hay alguien que impone con su sola presencia, ese es Ridley. Comandante de los Piratas Espaciales, temido en toda la galaxia y archienemigo de Samus Aran. Aunque muchos pensaron que nunca te veríamos en el torneo, aquí estás. ¿Cómo te sientes al unirte a la contienda?

Ridley entrecerró los ojos y sonrió de manera amenazante, mostrando sus afilados colmillos. No podía hablar, pero era claro que no vino con la intención de hacer amigos. Probablemente solo estaba aquí para seguir atormentando a Samus porque nunca se puede traumar lo suficiente a una persona.

El comentarista sintió un escalofrío recorrer su espalda al notar la forma en que Ridley lo observaba incluso sin estar frente a frente, como un depredador acechando a su presa. Aclaró su garganta e intentó seguir con la entrevista sin titubear demasiado.

—Sabemos que eres uno de los combatientes más temibles en esta edición. Tu velocidad, ferocidad y ataques brutales te convierten en una amenaza en cualquier enfrentamiento. ¿Qué tienes que decirles a tus oponentes?

Ridley abrió sus enormes alas y lanzó otro rugido ensordecedor antes de inclinarse hacia el micrófono con una sonrisa siniestra. No necesitaba palabras para hacer entender su mensaje: nadie estaba a salvo.

El comentarista rió con nerviosismo.

—Bueno... creo que eso lo dice todo. Con ataques aéreos devastadores, garras afiladas y la capacidad de lanzar a tus enemigos por los aires con facilidad, seguramente harás que muchos combatientes teman encontrarse contigo en la arena.

Combatiente 66: Simon

—No comprendo del todo por qué he sido invitado a este, eh, torneo —Simon Belmont habló de brazos cruzados—. Pero he visto a ciertas... criaturas que tal vez deba exterminar, por el bien de todos los demás. Pensé que ya había visto todos los males de este mundo, pero... llegar a este sitio por primera vez me hace pensar que no es así.

El comentarista asintió, intrigado por la seriedad del cazador de vampiros.

—Bueno, Simon, tu llegada es sin duda una gran sorpresa para muchos. Eres un guerrero legendario, perteneciente a una larga línea de cazadores de monstruos. Con tu látigo sagrado, la Vampire Killer, y tu arsenal de armas secundarias, estás más que preparado para este torneo. ¿Cómo te sientes al enfrentar a oponentes que no necesariamente son criaturas de la noche?

Simon cerró los ojos por un momento, como meditando su respuesta.

—Todo enemigo es una amenaza si se le subestima. Sean monstruos, guerreros o incluso dioses… no me detendré hasta que caigan.

El comentarista tragó saliva.

—¡Eso sí que es determinación! Tu estilo de lucha es único en este torneo. Tus ataques de largo alcance con la Vampire Killer y el uso de herramientas como cruces, hachas y agua bendita te hacen un combatiente impredecible. ¿Tienes alguna estrategia en mente para la competencia?

Simon levantó su látigo y lo hizo crujir en el aire con precisión letal.

—Mantener la distancia cuando sea necesario, atacar con contundencia cuando se presente la oportunidad. Pero sobre todo… asegurarme de que cualquier criatura oscura que encuentre aquí no salga con vida.

El comentarista rió nervioso.

—Bueno, bueno… parece que algunos combatientes deberían empezar a preocuparse. ¡Bienvenido al torneo, Simon! Estamos ansiosos por ver de lo que eres capaz.

Combatiente 66Ԑ: Richter

—La verdad, no sé qué es Smash Bros. —confesó el joven Belmont—. Pero algunas personas han sido bastante amables para guiarme un poco como uno de los nuevos. Dicho eso, me sorprende que uno de mis antepasados también forme parte del torneo. Solo espero que esto no le incomode o se le haga más extraño de lo que ya es...

—¡Bueno, Richter! Puede que no estés completamente familiarizado con Smash Bros., pero lo que sí sabemos es que vienes de una prestigiosa línea de cazadores de monstruos y que tu habilidad en combate es indiscutible. Tu estilo de pelea es similar al de Simon, pero con un poco más de agilidad y destreza. ¿Cómo te sientes al entrar en la contienda?

Richter se cruzó de brazos y sonrió con confianza.

—Supongo que es una buena oportunidad para probar mis habilidades contra todo tipo de luchadores. He enfrentado vampiros, demonios y todo tipo de horrores, así que esto no debería ser muy diferente.

—¡Eso es el espíritu de un verdadero Belmont! Tu manejo de la Vampire Killer es impresionante, y combinándolo con herramientas como la cruz arrojadiza, el hacha y el agua bendita, seguramente pondrás en aprietos a muchos rivales. ¿Alguna estrategia en particular para este torneo?

Richter giró su látigo con soltura antes de responder.

—Mantenerme en movimiento. Si algo he aprendido en mis batallas es que la clave no solo está en atacar, sino en saber cuándo y cómo moverse. Y si eso no funciona, bueno… siempre puedo hacer que mis enemigos sientan el poder de la Vampire Killer de cerca.

El comentarista rió.

—¡Eso suena a que nadie querrá bajar la guardia contigo cerca! Y dime, ¿cómo te sientes al ver a Simon en este torneo? Después de todo, no es todos los días que te encuentras con un antepasado en una competencia así.

Richter miró de reojo a Simon, quien observaba la conversación con los brazos cruzados y una expresión seria.

—Es… extraño, no voy a mentir. Pero si algo tenemos los Belmont es que estamos acostumbrados a las sorpresas. Supongo que esto es solo otra más.

—¡Pues será una sorpresa ver a los dos Belmonts en acción! ¡Bienvenido al torneo, Richter!

Combatiente 67: King. K. Rool

—¡Ya se habían tardado en invitarme! —exclamó el Rey de los Kremlings con una gran sonrisa—. Esos idiotas de los Kong creyeron que podrían divertirse sin mi presencia. ¡Ja! No esta vez. Ahora que al fin me he unido a Smash Bros., me aseguraré de que no se vuelvan a olvidar de mí tan fácilmente.

—¡Y vaya que has llegado con actitud! King K. Rool, eres el eterno rival de Donkey Kong y has demostrado ser un enemigo implacable en múltiples ocasiones. Tu fuerza bruta, arsenal de ataques y resistencia te hacen un combatiente peligroso. ¿Cómo te sientes al finalmente unirte a la contienda?

El rey kremling infló el pecho y soltó una carcajada exagerada, golpeándose la panza con orgullo.

—¡Me siento como un verdadero rey! Por mucho tiempo tuve que ver cómo esos monos se llevaban toda la gloria, pero ahora... ¡ahora la balanza se inclina a mi favor!

—Bueno... eso está por verse. Sabemos que eres un combatiente versátil, con ataques de gran potencia, proyectiles y hasta una armadura ventral que te hace más resistente. ¿Tienes alguna estrategia en mente para aplastar a tus rivales?

K. Rool entrecerró los ojos con una sonrisa maliciosa.

—Estrategia, dices... Bah, ¿qué importa eso? ¡Solo hay que dominar con pura fuerza bruta! Entre cañonazos, embestidas y un par de sorpresas de mi parte, no quedará nadie en pie para desafiar mi reinado.

—¡Eso sí que es confianza! Pero, dime, ¿qué opinas de que Donkey Kong y Diddy Kong también están en el torneo?

La sonrisa de K. Rool se amplió aún más, mostrando sus colmillos.

—¡Ja! ¡Mejor aún! Nada me dará más placer que derrotar a esos dos frente a todos. Después de todos estos años, llegó la hora de que K. Rool domine la competencia.

—¡Pues parece que la arena será testigo de una verdadera batalla de titanes! ¡Bienvenido al torneo, King K. Rool!

Combatiente 68: Canela

El asiento en donde la chica debería estar se encontraba vacío, desconcertando al comentarista.

—Uh... ¿dónde está Canela? —preguntó, y desde su lugar, movió la cámara que debería estarla grabando para tratar de encontrarla.

—¡Perdón! Estaré allí en un momento! —la voz de Canela habló desde atrás, y el comentarista la volteo para encontrarla reorganizando un montón de libros en una estantería que había en el cuarto, no solo por colores sino también alfabéticamente por lo que podía ver.

—...¿Qué haces?

—¡Reorganizo! —respondió la canina alegremente mientras se movía tan rápido a otro lado del cuarto que casi podía equiparar la velocidad de Sonic.

El comentarista movió la cámara, ahora apuntando a Canela reorganizando varias filas de papeles que habían en un escritorio.

—Canela, ¿por qué estás...?

—¡Me tranquiliza! —Canela interrumpió abruptamente, mas sin dejar de trabajar—. Cuando estoy demasiado nerviosa, trato de distraer mi mente con tareas para poner mis pensamientos en orden y no quedar mal. ¡Funciona cuando ayudo al Alcalde con sus tareas!

—¿Alcalde? ¡Oh, te refieres al Aldeano! Entonces supongo que estás nerviosa por haber sido invitada a Smash Bros. sin previo aviso. Digo, es tu primer torneo...

—¡Sí! —admitió Canela con una risita nerviosa mientras seguía organizando papeles—. No esperaba algo así, la verdad. Estoy más acostumbrada a ayudar con la administración de la aldea, planificar eventos y, bueno, ¡mantener todo en orden! ¡Pero pelear en un torneo como este es completamente diferente!

El comentarista sonrió, entretenido por su energía inagotable.

—Bueno, eso es cierto, pero también hemos visto que, a pesar de tu apariencia adorable, tienes un estilo de combate bastante interesante. Usas herramientas cotidianas como cañas de pescar, trampas y hasta globos para confundir a tus oponentes. ¿Tienes alguna estrategia en mente para este torneo?

Canela finalmente dejó de reorganizar y se tomó un momento para pensar.

—Mmm… bueno, creo que solo trataré de hacer lo mejor que pueda sin molestar demasiado a los demás. ¡No quiero hacer enemigos! Pero si tengo que pelear, usaré todo lo que sé para hacerlo de manera ordenada y justa. ¡Y sin olvidar los buenos modales!

El comentarista rió.

—¡Eso es un enfoque único para Smash!

Combatiente 69: Incineroar

—¡Roar! —el Pokémon de Alola exclamó con emoción, su "cinturón" ardiendo en más llamas de lo normal.

—¡Nos encanta verte tan entusiasmado, Incineroar! Sabemos que eres un luchador nato y que cada batalla es un espectáculo para ti. ¿Cómo te sientes de estar en Smash Bros. y demostrar tu fuerza en esta arena?

Incineroar golpeó su puño contra la palma de su otra mano y luego señaló hacia la cámara, con una expresión desafiante.

—¡Roooar!

—¡Ja, ja! ¡Eso es lo que nos gusta escuchar! Eres un Pokémon con un estilo de combate único, basado en la lucha libre. Tus movimientos son poderosos, con agarres, lanzamientos y contraataques que pueden hacer temblar a cualquier oponente. ¿Tienes alguna estrategia especial para este torneo?

El Pokémon felino flexionó los brazos, mostrando su físico musculoso, y luego hizo una pose dramática, como si esperara una ovación del público imaginario.

—¡Roooaaar!

—¡Jajaja, está claro que planeas dar un gran espectáculo!

Combatiente 70: Planta Piraña

Una Planta Piraña estaba sentada, y al parecer, la misma es capaz de usar sus raíces como pequeñas patas para poder moverse. Dicho eso... ¿por qué hay una maldita planta en el plantel?

Mario y Bowser, que decidieron entrar junto a la planta por precaución, estaban sentados cada uno a un lado distinto de la misma, y mientras que la planta en sí parecía sonreír con diversión al ver las reacciones de Mario y Bowser, estos solo se preguntaban cómo siquiera llegaron hasta este punto.

—...Bowser... —Mario comenzó lentamente, pasando su mano por su cara con decepción—. ¿Por qué hay una Planta Piraña participando?

—...¿Sabes? Usualmente me complacería verte irritado, pero debo compartir el sentimiento... —confesó el Rey Koopa, juntando sus manos—. No comprendo cómo es que una de mis plantas acabó siendo un combatiente en este sitio...

—Eh... bueno, esto es sin duda una sorpresa —comentó el comentarista antes de carraspear—. ¡Demos la bienvenida a la Combatiente 70, la Planta Piraña! —anunció, tratando de sonar entusiasta.

La Planta Piraña agitó sus hojas con emoción y lanzó un par de mordidas al aire, como si estuviera mostrando sus habilidades.

Mario suspiró, todavía tratando de procesar la situación.

—Mamma mia... esto tiene que ser una broma.

Bowser, por su parte, se cruzó de brazos y gruñó.

—Mira, no voy a quejarme si una de mis propias creaciones logra sobresalir en Smash, pero aún así… ¿en serio? ¿Una Planta Piraña? ¿No había mejores opciones?

La Planta Piraña siseó indignada y golpeó el suelo con su maceta, la cual no se rompió o siquiera tuvo un rasguño ante la acción.

El comentarista, tratando de mantener el profesionalismo, se aclaró la garganta.

—Bueno, Planta Piraña, has sorprendido a todos con tu inclusión en el torneo. Sabemos que tienes un estilo de pelea único, con mordiscos veloces, golpes con la maceta y hasta la capacidad de lanzar bolas de espinas. ¿Tienes alguna estrategia en mente?

La Planta Piraña se inclinó hacia adelante, sacando su enorme lengua como si se estuviera burlando de la pregunta. Luego, con un rápido movimiento, giró sobre sí misma y disparó una bola de pinchos hacia un costado, impactando contra un panel acolchonado de la sala.

—¡Whoa! ¡Eso sí que fue un despliegue de poder! —exclamó el comentarista, sorprendido—. Parece que no piensas quedarte atrás en este torneo.

Mario negó con la cabeza.

—Esto es absurdo...

Bowser soltó una carcajada.

—He cambiado de opinión. Me gusta esta Planta Piraña.

La Planta Piraña giró su cabeza con orgullo, hinchando el pecho como si hubiera recibido un gran halago.

Combatiente 71: Joker

—Oh, a mí no me invitaron. Yo robé la carta —dijo Ren con una sonrisa algo traviesa, sosteniendo con solo dos dedos el sobre blanco con el sello rojo que caracteriza las invitaciones a Smash Bros.—. De todas formas, este torneo sonaba muy interesante como para dejarlo pasar.

—Eh. Las reglas solo dicen que todo aquel con una carta puede entrar. Ya cómo la obtuvieses me da igual —dijo el comentarista con indiferencia—. Así que, Ren Amamiya, ¿no? O como te conocen la mayoría, Joker. Estudiante de segundo año en la Academia Shujin y líder de los Phantom Thieves of Hearts. ¡Bienvenido al torneo!

Joker ajustó sus guantes rojos con calma y dejó la carta sobre la mesa con un gesto despreocupado.

—Gracias. Aunque, para ser sincero, no estoy acostumbrado a participar en eventos tan... públicos.

—¡Bueno, este torneo es el mayor espectáculo de combate que existe! —exclamó el comentarista—. Y por lo que sabemos, tienes todas las habilidades necesarias para destacar. Eres un luchador ágil, con reflejos impresionantes y un dominio del combate que deja en ridículo a muchos. Además, cuentas con un as bajo la manga... ¿O debería decir, un Persona?

Joker sonrió levemente y ajustó su antifaz.

—Nunca está de más tener aliados poderosos.

—¡Exacto! Arsène es un gran compañero en batalla, amplificando tu poder y dándote ataques devastadores. Sin mencionar que también eres un experto en esquivar y contraatacar con precisión quirúrgica. ¿Tienes alguna estrategia especial para este torneo?

Joker cruzó los brazos y miró hacia la cámara con confianza.

—Observar, analizar y actuar en el momento oportuno. La paciencia es clave, igual que en un buen atraco.

—¡Eso suena intrigante! Y dime, ¿cómo te sientes respecto a enfrentarte a oponentes de mundos completamente distintos al tuyo?

Joker apoyó una mano en su cadera y ladeó la cabeza con una sonrisa.

—Bueno, si he podido lidiar con demonios, dioses y realidades distorsionadas... no creo que nada aquí me sorprenda demasiado.

Combatiente 72: Héroe/El Luminario

—Nunca antes había estado en un torneo —confesó Once, conocido mejor como Héroe o el Luminario—. En general, suelo pelear más por defensa propia que por diversión, De todos modos, espero poder estar a la altura de este evento.

—¡Esa es la actitud de un verdadero héroe! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Después de todo, este torneo está lleno de combatientes que buscan demostrar su fuerza y habilidades, ¡y tú sin duda tienes mucho que ofrecer!

El Luminario asintió en silencio, su expresión tranquila pero decidida. Con una mano en la empuñadura de su espada, proyectaba una presencia serena pero imponente, propia de un guerrero destinado a la grandeza.

—Sabemos que vienes de un mundo donde la magia y las leyendas son parte de la vida diaria —continuó el comentarista—. Eres el elegido para enfrentarte a la oscuridad y salvar a tu reino. Pero aquí en Smash Bros., te encontrarás con desafíos completamente distintos. ¿Cómo crees que te adaptarás?

El Luminario miró a su alrededor, como analizando el ambiente, y luego respondió con calma:

—Los desafíos son diferentes, pero el objetivo sigue siendo el mismo: luchar con honor y hacer lo correcto.

—¡Bien dicho! Y no podemos olvidar que tienes un repertorio de hechizos impresionante. Desde lanzar poderosos rayos hasta convertirte en metal temporalmente. ¡Eres un oponente versátil!

El Héroe tomó su grimorio y lo abrió con un gesto hábil, como si repasara sus opciones de magia en ese instante. Luego, lo cerró con determinación.

—Siempre hay que estar preparado.

—¡Nos encanta esa mentalidad! —dijo el comentarista, claramente emocionado.

Combatiente 73: Banjo y Kazooie

—¡Guh-huh! ¡Es un placer estar aquí finalmente! —exclamó Banjo con emoción.

—¡Sí! ¡Ya se estaban tardando demasiado en invitarnos a la fiesta! —dijo Kazooie, y aunque su voz detonaba molestia, no pudo evitar sonreír ligeramente.

—¡Mejor tarde que nunca! —exclamó el comentarista—. Bienvenidos sean a Smash, Banjo y Kazooie. Su primer torneo, ¡y el más grande además!

Banjo asintió con entusiasmo mientras ajustaba su mochila, dentro de la cual Kazooie se acomodó con aire confiado.

—Sí, sí, el más grande —dijo la pájaro con un tono burlón—. Aunque la competencia no parece tan dura... Quiero decir, ¿una Planta Piraña? ¿En serio?

—¡Bueno, Smash Bros. siempre está lleno de sorpresas! Pero hablemos de ustedes: son un dúo icónico, con un estilo de pelea basado en el trabajo en equipo. ¿Cómo planean enfrentarse a los demás combatientes?

Banjo se llevó una garra al mentón, pensativo.

—Bueno, creo que usaremos nuestra combinación de fuerza y astucia para encontrar la mejor estrategia en cada pelea —dijo con su tono amable de siempre.

Kazooie, sin embargo, rodó los ojos.

—Bah, yo simplemente planeo atacar sin parar hasta que alguien salga volando.

El comentarista soltó una carcajada.

—¡Un enfoque bastante agresivo! Pero no podemos negar que su repertorio de movimientos es impresionante. Desde el ataque Rodillo de Huevo hasta el Vuelo Propulsado, tienen muchas maneras de sorprender a sus oponentes.

Kazooie infló el pecho con orgullo.

—Obvio. Y si alguien cree que puede ganarnos fácilmente, que lo intente. ¡Voy a hacer que escupan plumas!

Banjo sonrió con calma.

—Esperamos dar un buen espectáculo y divertirnos en el proceso.

—¡Eso es el espíritu! —exclamó el comentarista.

Combatiente 74: Terry

—¡Ja! Nunca rechazo un buen combate, sea el torneo que sea —dijo Terry Bogard con confianza y sus brazos cruzados—. ¡Que se pongan en fila todos los que crean que pueden contra mí! El Gran Terry Bogard no ha caído todavía, ¡y no lo haré en mi primer torneo de Smash o como se llame!

—¡Esa es la actitud que nos encanta ver! —exclamó el comentarista con entusiasmo—. Terry Bogard, el lobo solitario, el ícono de Fatal Fury y el rey de los combates callejeros. ¡Bienvenido a Smash Bros.!

Terry se ajustó su gorra roja con una sonrisa confiada.

—Gracias, amigo. No hay mejor manera de probar mi fuerza que en un torneo con los mejores luchadores del mundo.

—Y vaya que aquí te enfrentarás a todo tipo de oponentes. Tenemos desde guerreros legendarios hasta… bueno, ¡una Planta Piraña!

Terry soltó una carcajada.

—¡Ja! Mientras sepan lanzar un buen golpe, me da igual quién sea mi oponente.

—¡Eso es espíritu de luchador! Y hablando de eso, hablemos de tu estilo de pelea. Eres un experto en artes marciales y combates callejeros, con poderosos ataques especiales como el Burn Knuckle y el Power Geyser. Sin olvidar que, cuando estás al borde de la derrota, ¡desatas tu verdadero potencial con movimientos aún más devastadores!

Terry asintió y levantó el pulgar.

—¡Así es! No importa qué tan duro sea el combate, siempre tengo una carta bajo la manga. ¡No me rindo hasta el último segundo!

—¡Eso es lo que queremos ver en Smash Bros.!

Combatiente 75: Byleth

—Siendo honesta, me alegra que la recepción de los combatientes fuese más positiva que la del público —confesó Byleth con una sonrisa algo nerviosa—. Estaba convencida de que se retractarían de haberme invitado a un evento tan importante.

—Sí, el público fue algo... duro contigo, pero es un alivio saber que los combatientes te han hecho sentir bienvenida, Byleth —dijo el comentarista con un tono comprensivo.

—Supongo que no es fácil ser la nueva en un torneo con tantas leyendas —continuó Byleth, cruzando los brazos—. Pero he aprendido a no preocuparme demasiado por las opiniones ajenas. Prefiero demostrar mi valía con hechos, no con palabras.

—¡Esa es la mentalidad de un verdadero guerrero! —exclamó el comentarista—. Y bueno, no es como si fueras una novata en combate. Eres una estratega excepcional y una espadachina formidable. Sin mencionar que tu arsenal incluye más que solo una espada.

Byleth asintió, y con un movimiento ágil, materializó la Espada de la Creación en su mano.

—En la guerra, uno debe ser versátil. Por eso manejo múltiples armas: lanza, arco y hacha. Elegir la herramienta adecuada para cada situación es clave en la batalla.

—¡Exactamente! Y tu habilidad con la Espada de la Creación te da un alcance impresionante. No muchos pueden presumir de blandir un arma así de única.

—No es solo un arma —corrigió Byleth con una leve sonrisa—. Es un símbolo. Representa el destino que he aceptado y el camino que he elegido seguir.

—Entonces, ¿qué esperas lograr en este torneo?

Byleth miró a la cámara con seriedad.

—No busco gloria ni reconocimiento. Solo quiero luchar con honor y aprender de cada enfrentamiento. Si al final del torneo soy una guerrera más fuerte de lo que era al principio, habré cumplido mi objetivo.

—¡Un espíritu digno de un verdadero campeón! Con esa mentalidad, sin duda dejarás tu marca en Smash Bros.

Combatiente 76: Min Min

—¡Es increíble haber entrado aquí! —exclamó la chica felizmente, entrelazando sus manos—. Enfrento a peleadores con las mismas habilidades que yo todos los días. ¡Enfrentarme a combatientes que aprovechan habilidades que pueden ponerme en apuros es justo el cambio de aires que necesito!

—¡Esa es la actitud correcta! —dijo el comentarista con entusiasmo—. Min Min, la luchadora de ramen y campeona del Grand Prix de ARMS. ¡Bienvenida al torneo de Smash Bros.!

Min Min sonrió y se ajustó su gorra con el logo de su restaurante familiar.

—Gracias. Es un honor estar aquí. Aunque tengo que admitir que cuando recibí la invitación, pensé que era una broma.

—¡Pues no lo es! Y aquí estás, lista para demostrar que los luchadores de ARMS pueden competir con los mejores. Tu estilo de pelea es único en Smash, con brazos extensibles que te permiten mantener la distancia y presionar a tus oponentes. ¿Cómo crees que te adaptarás al ritmo de combate de este torneo?

Min Min cruzó los brazos, pensativa.

—Es cierto que tengo la ventaja de la distancia, pero también sé que aquí hay muchos combatientes que pueden acercarse en un abrir y cerrar de ojos. Tendré que estar alerta y usar mi velocidad para mantenerlos a raya.

—¡Buena estrategia! Y además, puedes cambiar entre diferentes tipos de puños en medio de la batalla. El Dragón, el Megawatt y el Ramram te dan mucha versatilidad en combate. ¿Tienes un favorito?

Min Min sonrió con picardía.

—El Dragón es el más equilibrado, pero el Megawatt es perfecto para acabar con los oponentes cuando ya están débiles. Aunque el Ramram también es útil para presionar a los que intentan esquivarme demasiado. Dependerá de la situación.

—¡Eso suena prometedor!

Y una última pregunta: ¿planeas celebrar con un buen plato de ramen después de cada victoria?

Min Min soltó una pequeña risa.

—¡Por supuesto! Nada mejor que un buen tazón de ramen después de un combate intenso. Y si gano el torneo… bueno, quizás invite a todos a un gran festín.

—¡Eso suena como una razón más para apoyarte!

Combatiente 77: Steve

El comentarista, por una vez, se quedó sin comentarios. Al principio creyó que era una broma de mal gusto el hecho de que un personaje tan curioso como Steve fuese invitado al torneo, pero al ver que no se iba y que seguía tratando de picar la silla en la que tenía que sentarse, sin éxito, supo que no lo era.

—Ehm... Steve, ¿verdad? —dijo el comentarista, intentando procesar la escena—. Supongo que... bienvenido al torneo de Smash Bros.

Steve dejó de picar la silla con su pico de hierro y miró al comentarista con su expresión completamente neutral. Luego, sacó un bloque de tierra de la nada y lo colocó sobre la mesa.

—Esto... ¿es un regalo? —preguntó el comentarista, algo confundido.

Steve no respondió. Simplemente sacó otro bloque, esta vez de piedra, y lo puso sobre el anterior. Luego, otro de madera.

—Oh, ya veo. ¿Nos estás mostrando cómo funcionan tus habilidades?

Steve asintió levemente, aunque su expresión no cambió en absoluto.

—Bueno, tenemos que admitir que eres un combatiente bastante... único. Puedes construir estructuras en pleno combate, minar recursos y hasta craftear herramientas más poderosas. ¡Eso es algo que nunca hemos visto en Smash Bros. antes!

Steve sacó una mesa de crafteo y comenzó a trabajar en ella, produciendo un brillo leve antes de sacar una espada de diamante. Luego, miró al comentarista en silencio.

—¡Oh, wow! Así que puedes mejorar tu equipo en pleno combate. ¡Eso sin duda te dará ventaja contra oponentes desprevenidos!

Steve sacó una cama y la colocó en el suelo. Luego, se acostó en ella por un par de segundos antes de levantarse de golpe.

El comentarista soltó una risa nerviosa.

—Je, bueno... parece que también puedes tomarte un descanso cuando lo necesitas. No sé si te diste cuenta, Steve, pero en este torneo las peleas no tienen noche y día…

Steve simplemente sacó un cubo de lava y lo dejó caer sobre la mesa.

—¡WOAH! ¡De acuerdo, de acuerdo! ¡Definitivamente tienes formas creativas de luchar! Antes de que quemes todo el estudio... dime, ¿qué esperas de este torneo?

Steve se quedó quieto por un momento. Luego, sacó un cartel y escribió en él con rapidez antes de girarlo para mostrar el mensaje:

"Diamantes."

—¡JAJAJA! Bueno, al menos tienes prioridades claras. ¡Bienvenido a Smash Bros., Steve! ¡Y por favor, no pongas dinamita en la arena!

Steve miró el altavoz desde el que hablaba el comentarista... y lentamente guardó la dinamita que ya tenía en la mano.

Combatiente 78: Sephiroth

—Oh, el torneo no es la razón por la que vine —comentó el Ángel de un Ala con una sonrisa siniestra—. Una oportunidad para atormentar a Cloud es algo que no puedo dejar pasar así porque sí.

—Sephiroth —el comentarista dijo con un tono que mezclaba respeto y nerviosismo—. El SOLDADO caído que perdió la cordura. Has venido a Smash Bros. solo para seguir torturando a Cloud, pero más de un combatiente parece querer medirse contigo en combate.

—Eso es irrelevante —respondió Sephiroth con su tono sereno pero amenazante—. No importa quién se interponga en mi camino. Solo hay una persona que realmente me interesa en este torneo.

—Ehm... ya veo. Bueno, no hay duda de que tu presencia aquí ha causado un gran impacto. Eres uno de los villanos más temidos de todos los tiempos y posees una de las espadas más largas jamás vistas en Smash. ¿Cómo crees que se adaptará tu estilo de combate a este torneo?

Sephiroth cerró los ojos por un instante, como si la pregunta apenas le interesara.

—Mi fuerza está más allá de la comprensión de la mayoría de estos combatientes. No importa cuántos poderes posean o qué habilidades tengan… la desesperación es inevitable.

El comentarista sintió un escalofrío recorrer su espalda, pero decidió mantener la compostura.

—Y hablando de desesperación... Tu capacidad de entrar en un estado alado cuando estás en desventaja sin duda es algo aterrador. ¿Dirías que eso te da una ventaja aún mayor contra tus oponentes?

Sephiroth esbozó una sonrisa casi divertida.

—¿Desventaja? Qué concepto más ingenuo. No hay un solo momento en el que esté en desventaja. La única diferencia es cuánto decido esforzarme.

—¡Vaya, qué confianza! —El comentarista intentó reír, pero sonó un poco nervioso—. También tienes ataques devastadores como Flare, Gigaflare y, por supuesto… Supernova. ¿Puedes hablarnos un poco de esa última técnica?

El guerrero alzó ligeramente su barbilla, sus ojos resplandeciendo con un brillo gélido.

—Supernova es el fin de la esperanza. Un espectáculo de destrucción absoluta que sumerge a los oponentes en el caos y el tormento. ¿Cuántos pueden decir que han presenciado la destrucción de un universo y han sobrevivido para contarlo?

—E-Eso es… bastante intenso.

Sephiroth inclinó la cabeza levemente.

—Intenso... es una palabra demasiado leve para describir lo que es la verdadera desesperación.

Combatientes 79 y 80: Pyra/Mythra

—Es un verdadero honor haber sido incluidas para un torneo tan especial —dijo Pyra con una pequeña sonrisa—. Solo me deja un mal sabor de boca que Rex se sienta algo excluido considerando que solo aparece para nuestro Smash Final.

Pronto, el cuerpo de Pyra brilló, y la chica de pelo rojo y corto con vestimenta roja fue reemplazada por una chica de pelo rubio y largo con vestimenta blanca, la cual se reclinó en la silla bruscamente en comparación a lo formal que Pyra estaba sentada.

—¡Ja! Estaba segura de que el pobre se iba a echar a llorar —comentó Mythra con una sonrisa burlona—. Oh bueno, una aparición es mejor que nada, ¿no?

—¡Increíble! ¡El dúo de Espadas Égidas en persona! Pyra y Mythra, dos lados de una misma moneda. Ustedes traen al torneo un estilo de combate muy versátil, alternando entre la potencia de Pyra y la velocidad de Mythra. ¿Cómo creen que eso les beneficiará en la competencia?

Pyra tomó el control y apoyó una mano en su pecho, sonriendo con amabilidad.

—Creo que nuestra habilidad de intercambiar nos permite adaptarnos a muchas situaciones. Si necesito más poder de ataque, puedo luchar como Pyra, y si la velocidad es clave, Mythra toma el control.

—¡Exacto! —interrumpió Mythra, tomando abruptamente el control y cruzando los brazos con aire confiado—. Mientras que Pyra es mejor para acabar con los oponentes, yo puedo presionar con ataques rápidos y esquivar con más facilidad. Básicamente, tenemos lo mejor de ambos mundos.

—¡Eso suena como una gran ventaja! —dijo el comentarista con entusiasmo—. Ahora, en cuanto a su Smash Final... ¡parece que Rex no se queda atrás del todo! ¿Cómo se sienten al compartir esa técnica con él?

Pyra volvió a tomar el control y sonrió con nostalgia.

—Es reconfortante saber que sigue siendo parte de esto. Él es quien nos ayudó a llegar hasta aquí, después de todo.

Luego, Mythra cambió nuevamente y se encogió de hombros.

—Eh, supongo que está bien. Aunque me hubiera gustado que tuviera más participación en combate. Pero bueno, al menos no está en casa quejándose de no haber sido invitado.

—Estoy seguro de que lo comprenderá.

Combatiente 81: Kazuya

—Estoy aquí para ganar más poder —dijo Kazuya, sonriendo de forma siniestra con los brazos cruzados—. Los combates son solo un medio para un fin.

—¡Vaya declaración de intenciones! —dijo el comentarista, algo inquieto por la frialdad en la voz de Kazuya—. Vienes de una de las sagas de pelea más legendarias, Tekken, y tu estilo de combate es brutal y técnico. ¿Cómo crees que te adaptarás a un entorno como Smash Bros.?

Kazuya cerró los ojos un momento antes de responder con su tono grave y seguro.

—No necesito adaptarme. Los demás deberán adaptarse a mí.

El comentarista soltó una risa nerviosa.

—Ehm... bueno, es cierto que tienes una de las ofensivas más demoledoras del torneo. ¡Cada uno de tus golpes puede mandar a volar a un oponente con facilidad! Y eso sin mencionar que puedes transformarte en tu forma demoníaca.

Kazuya sonrió de lado, abriendo un ojo con un brillo rojo intimidante.

—El poder del Diablo no es algo que cualquiera pueda manejar. Aquellos que se interpongan en mi camino conocerán el verdadero significado de la derrota.

—¡Uf! Eso suena... intenso. También eres conocido por lanzar a tus enemigos por acantilados. ¿Debemos preocuparnos de que intentes hacer lo mismo aquí?

—Si alguien es lo suficientemente débil como para caer, no es mi problema.

—Bueno, bueno... no hay duda de que serás un rival temible.

Combatiente 82: Sora

—¡Increíble! —exclamó el comentarista al ver quién era el último luchador—. Después de tantos años tratando de encontrarte para traerte hasta aquí... ¡al fin has llegado, Sora!

El portador de la Kingdom Key sostuve su Keyblade entre sus hombros con una enorme sonrisa.

—Es un placer estar aquí, de verdad —dijo Sora—. Lamento haberme tardado tanto en llegar, pero... creo que hubo ciertos problemas que me hicieron un concursante difícil de contactar.

—¡No te preocupes, lo importante es que al fin estás aquí! —dijo el comentarista con entusiasmo—. Eres el último combatiente en unirte a este increíble torneo, y los fans han estado esperando tu llegada por años. ¿Cómo te sientes al ser parte de Smash Bros.?

Sora giró su Keyblade con facilidad antes de apoyarla sobre su hombro.

—¡Es emocionante! Siempre me ha gustado la idea de enfrentarme a grandes héroes y guerreros de diferentes mundos. Además, esto se siente como una nueva aventura, y yo nunca rechazo una buena aventura.

—¡Eso es el espíritu! Hablando de aventuras, eres conocido por tu increíble capacidad de combate, combinando ataques aéreos fluidos, magia poderosa y, por supuesto, tu Keyblade. ¿Cómo crees que se comparará tu estilo de pelea con el de otros combatientes aquí?

Sora se llevó una mano a la barbilla, pensativo.

—Bueno, he peleado contra enemigos de todo tipo: hechiceros, espadachines, criaturas enormes... Creo que mi habilidad para adaptarme me ayudará bastante aquí. Además, mi movilidad aérea me da una ventaja en muchos enfrentamientos.

—¡Definitivamente! —asintió el comentarista—. Y hablemos de tu magia. Puedes usar Piro, Electro y Hielo para atacar a tus oponentes de diferentes maneras. ¿Tienes un hechizo favorito?

Sora sonrió.

—Depende de la situación. Electro es genial para interrumpir a varios enemigos a la vez, Piro me ayuda a mantener la presión, y Hielo puede congelar a mis oponentes para darme ventaja. Supongo que los usaré todos según lo necesite.

—¡Estrategia inteligente! Y, por supuesto, no podemos olvidar tu Smash Final. ¡Traes consigo el icónico Cierre de la Llave!

Sora asintió con emoción.

—Sí, es una técnica muy especial para mí. Sellar la oscuridad es parte de mi misión, después de todo.

—¡Eso es cierto! Y antes de terminar, tengo que preguntar... ¿extrañas a Donald y Goofy?

Sora soltó una pequeña risa y asintió.

—Por supuesto. Siempre han estado conmigo en cada batalla. Pero sé que estarán animándome desde donde estén.

—¡Seguro que sí! Pues bien, Sora, es un honor tenerte aquí. ¡Bienvenido a Smash Bros.!

Una vez Sora se retiró del cuarto, el comentarista suspiró aliviado.

—Bien, ese era el último... Ochenta y nueve entrevistas en un solo día... Esto es demasiado para cualquiera —murmuró, estirando los brazos y dejando caer los papeles de su libreta sobre la mesa—. Es igual. Ahora que todos están aquí, ¡la verdadera diversión comienza!

Sin saberlo, sin embargo, el propio comentarista era observado desde otra sola por dos manos flotantes enguantados: Master Hand, la mano derecha y calmada; y Crazy Hand, la mano izquierda fuera de control. Ambas se miraron y rieron antes de desaparecer en un chasquido...

Fin del Capítulo 1.